Puerto Sherry, en el Puerto de Santa María recibió la noche del 28 de Septiembre a la réplica de la nao Victoria que acaba de concluir II ruta marea de los descubrimientos, singladura mar Cantábrico. 20 voluntarios han acercado durante algo más de tres meses el patrimonio y la cultura andaluza por la costa cántabra.
Sevilla Actualidad. Sevilla fue clave en el descubrimiento de América, fueron muchos los barcos que partieron de su puerto hacia nuevas tierras y se convirtió en referencia para aquellos ávidos de aventura.
La nao Victoria fue una de aquellas naves que llevo a tantos y tantos españoles al Nuevo Mundo. Su espíritu sigue aún vivo gracias a la réplica que sigue surcando los mares. Esta vez, la nao Victoria ha estado viajando durante más de tres meses por la costa cántabra, haciendo escala en 14 puertos. El viaje concluyó la noche del 28 de Septiembre en Puerto Sherry.
En la nave viajaban veinte voluntarios que se han convertido en divulgadores del patrimonio y la cultura andaluza, dentro del evento Guadalquivir, río de historia. Esta itinerario formaba parte de la II ruta marea de los descubrimientos, singladura mar Cantábrico.
Entre los puertos visitados, destacamos Mutruki, Lekeitio, Santurce o Bilbao, así como La Coruña, Gijón, Fuenterrabía o Bermeo. En muchos de ellos participaron en actividades conmemorativas como en el 800 aniversario de la fundación de Guetaria o en Santander donde estuvo presente en el 2º Festival del mar.
La experiencia se ha valorado muy positivamente y ha recibido el respaldo del público que ha acudido a visitar la embarcación y escuchar las explicaciones dadas por los voluntarios. Las cifras de asistencia han superado las 3.000 personas en algunos puertos, superando las 40.000 en todo el proyecto.
Una vez más Sevilla y el Cantábrico están unidos por la historia del Nuevo Mundo, pues muchos de los marinos que se embarcaron en tierras andaluzas provenían del litoral cantábrico. Una historia común que jamás se olvidará y que supuso uno de los grandes descubrimientos de la historia y una gran fuente de riquezas durante tres siglos.
Esta aventura no hubiera sido posible sin el patrocinio de Cruzcampo y el Grupo Pascual, además de los 20 voluntarios que han revivido la magia del mar a bordo de una nao.