Cenador del León /Alcázar
Cenador del León /Alcázar

La rehabilitación del Cenador del León del Real Alcázar ha deparado una agradable sorpresa. Durante el proceso los rehabilitadores han descubierto unas «pinturas medievales» probablemente pertenecientes al reinado de Pedro I, cuya existencia era desconocida hasta ahora. Los restauradores también han descubierto vestigios de pinturas de Juan de Medina que habían quedado cubiertas por la «superposición de capas de pintura» sufrida por el Cenador del León como consecuencia de las intervenciones acometidas en él a lo largo del tiempo.

Todos estos vestigios han sido descubiertos durante la restauración destinada a combatir los efectos del agua y el tiempo en el Cenador del León del Real Alcázar, su estanque y su jardín adyacente, que data del siglo XVII, que se han recuperado para el circuito turístico. Gracias a estas actuaciones se ha devuelto a este enclave «toda su identidad y su riqueza cromática».

El alcalde de Sevilla, Juan Espadas, ha visitado este viernes los jardines de los Reales Alcázares junto al concejal de Cultura y Turismo, Antonio Muñoz, el alcaide del monumento palaciego, Bernardo Bueno, y la arquitecta Dolores Robador, encargada de la actuación de restauración acometida desde julio de 2017 en el espacio conformado por el Cenador del León, el estanque ubicado frente a dicho pabellón y el jardín que acompaña a estas construcciones.

Este singular conjunto paisajístico de estilo manierista adornado por bellas pinturas de Juan de Medina y una magnífica azulejería sufría un estado «crítico» en materia de conservación, como consecuencia de la acción del agua y el tiempo.

Efectos del agua

En concreto, las filtraciones de agua a través de la cubierta del cenador y el efecto de la capilaridad estaban afectando a las pinturas y azulejos de este recogido enclave de los jardines de los Reales Alcázares. Dado el caso, la intervención acometida ha afrontado la restauración «integral» de este espacio, actuando en las pinturas y azulejos del cenador y el estanque y en su vegetación colindante.

Así, y como han explicado Dolores Robador y el alcalde hispalense, las actuaciones han contemplado desde la eliminación de humedades en los muros del cenador, hasta la restauración de su cubierta y pináculos, los pavimentos, las pinturas al fresco o los bancos, pasando por una nueva iluminación y la instalación de sistemas antipalomas. El estanque, además, ha sido sometido a un proceso de impermeabilización, siendo además rehabilitada su fuente de piedra y su cerrajería, entre otros aspectos.