El proyecto presentado por Rafael de la-Hoz y Gensler ha sido elegido ganador del concurso internacional de arquitectura convocado por el Real Betis para diseñar el nuevo Estadio Benito Villamarín, uno de los puntos más relevantes del Plan Estratégico 2022-26.

El consejo de administración se decantó en la votación final por la candidatura conjunta del arquitecto cordobés y el estudio estadounidense, que será la adjudicataria del diseño de este proyecto clave en el crecimiento del Club y que convertirá la casa de los béticos en uno de los recintos futbolísticos de referencia en el panorama nacional y un nuevo icono de la ciudad de Sevilla. 

La nueva instalación multiplicará los ingresos de la entidad con un nuevo concepto de estadio, mucho más abierto, moderno y que permitirá aumentar la actividad comercial del Club durante todo el año gracias a sus múltiples espacios de calidad. Su diseño potenciará la oferta de entretenimiento y restauración en los días de partido, antes, durante y después de los mismos, y también durante los días sin actividad deportiva, convirtiéndolo en un gran centro de ocio y centro de eventos, con un auditorio de 450 butacas, además de un importante punto de interés turístico en la ciudad.  

Nuevo concepto, misma esencia

El nuevo Benito Villamarín, pese al cambio de modelo conceptual, conservará la esencia y el espíritu del Real Betis y su afición, dando su sitio a la historia con la ampliación y mejora del Museo y el Tour, y potenciando la atmósfera y experiencia del aficionado con el aumento del confort y los servicios. 

El nuevo estadio contará con un aforo de 60.379 espectadores tras la demolición y construcción completa de la grada de Preferencia, que tendrá una capacidad para 15.745 asientos (11.533 de grada regular, 4.023 asientos premium y 180 de palco presidencial). El resto de las gradas no serán demolidas, pero tendrán cambios significativos que impactarán en el confort y experiencia del aficionado. El proyecto contempla la instalación de una cubierta sobre las cuatro gradas y una nueva fachada que cambiará por completo la imagen actual con una estética arquitectónica que envolverá el Estadio en las trece barras del escudo. 

La instalación contará con 4436 entradas premium, un 7,3% del total de la capacidad, un 30% serán modelo VIP (hospitality privado) y un 70% modelo Club (hospitality compartido). Además, el diseño cuenta con la flexibilidad necesaria para aumentar estas plazas en casos de mayor demanda. Estas zonas se podrán usar tanto los días de partidos como para la celebración de eventos de empresas.

Apuesta por la gastronomía

La propuesta gastronómica será otro de los grandes pilares sobre los que se asienta esta mejora de la experiencia del aficionado, tanto en días de partido como días sin partido, con un gran despliegue de puntos de venta de comida por todo el recinto y un pasillo de 360º en el primer anillo donde se concentrarán diferentes conceptos de restauración, como el mercado tipo gourmet ‘Green Market’.  

Entre las experiencias incluidas en el diseño se encuentran el ‘rooftop’ y el ‘sky lounge’, un espectacular espacio en lo más alto de la grada de Preferencia que ofrecerá servicios de restauración con vistas espectaculares de la ciudad, un marco inconfundible con el barrio de Heliópolis y el Puente del V Centenario como telón de fondo donde se podrán visualizar espectaculares atardeceres. 

El nuevo Estadio Benito Villamarín del Real Betis contempla igualmente tres puntos importantes para la ciudad: una dotación de espacios públicos de calidad, con una plaza principal con áreas verdes y peatonales, con zonas de ocio y paseo; la creación de servicios y equipamientos, como nuevas plazas de aparcamiento subterráneo y espacios comerciales que aumentarán la actividad de la zona durante todo el año; y sobre todo le ofrecerá a la ciudad un nuevo edificio icónico que va a proporcionar un impacto positivo de gran valor a la imagen de Sevilla. 

Del mismo modo, y siguiendo los valores impulsados por el Real Betis mediante su plataforma de sostenibilidad Forever Green, el nuevo Estadio será uno de los primeros en Europa que cuente con certificación medioambiental con un diseño enfocado a la optimización energética. El diseño aumenta también las localidades para personas con movilidad reducida (PMR), con más de 500 plazas (incluidas las de acompañantes) y espacios especialmente diseñados para el mejor disfrute de los partidos. 

Ejecución conjunta con el Ayuntamiento

La idea ganadora del concurso se ejecutará en perfecta coordinación con el Ayuntamiento de Sevilla y las diferentes áreas municipales implicadas. El Club desea, asimismo, hacer partícipes del modelo final a los diferentes colectivos y asociaciones pertenecientes al distrito Bellavista-La Palmera.

Para el arquitecto Rafael de la-Hoz se trata de «una gran oportunidad» de vincular «un recinto mítico» con el espacio público de una «ciudad legendaria». «Llevábamos tiempo esperando la oportunidad de trabajar en un estadio urbano y lo hemos conseguido en el mejor de los escenarios posibles, vinculando socialmente un recinto deportivo mítico como el Benito Villamarín con el espacio público de una ciudad legendaria como Sevilla», apuntó. 

«Éste no es solo un proyecto de transformación de un estadio para convertirlo en una infraestructura de vanguardia, sino, además, un proyecto de inserción urbana en un entorno como la Avenida de La Palmera y el barrio de Heliopolis. Todo ello lo hace especialmente interesante», continuó el arquitecto. 

Una vez seleccionada la candidatura ganadora, el Club empezará a trabajar junto a Rafael de la-Hoz y a Gensler con el proyecto básico y, posteriormente, con el proyecto de ejecución para licitar las obras, cuyo inicio está previsto para el próximo verano.