Bomberos durante la manifestación en la puerta del consistorio/Ernesto Molina.

En la mañana de ayer viernes, antes y durante la celebración del pleno municipal, los colectivos de policías locales y bomberos así como los vecinos de Miraflores se concentraban a las puertas del consistorio reclamando distintas necesidades.

 

Daniel Gutiérrez. Al llegar a la puerta de la casa consistorial, antes de la celebración del pleno municipal convocado a las diez de la mañana –y que comenzó a las once menos cuarto- un grupo de vecinos de Miraflores reclamaban más atención del ayuntamiento hispalense en materia de seguridad.

Los vecinos que se manifestaban tras coloridas pancartas y con silbatos, solicitaban a las distintas delegaciones municipales más seguridad ciudadana así como más apoyo y protección para los distintos programas sociales que se vienen desarrollando en la zona, y que sufren actos vandálicos constantemente.

Cuando Sánchez Monteseirín llegaba a la puerta del ayuntamiento se detuvo unos minutos con los ciudadanos que se manifestaban, atendiendo sus peticiones y escuchando las reclamaciones que realizaban.

Pasado el mediodía, ya sin el alcalde en el pleno –lo abandonó a las once y cuarto de la mañana- el ruido de la manifestación de los sindicatos policiales y de bomberos llegaba hasta el salón de plenos del ayuntamiento.

Juan Carlos Bernabé y Manuel Bustelo, dirigentes de las secciones sindicales de bomberos y policías locales respectivamente, indicaban a los medios de comunicación en la misma puerta del ayuntamiento las carencias que vienen sufriendo ambos cuerpos de atención y seguridad ciudadana.

«Queda un año para que acabe la legislatura y no queremos que nos sigan engañando«, indicó Bernabé, incidiendo en las principales carencias, sobre todo en lo referente a instalaciones -«los parques se caen a pedazos y hay ratas y cucarachas»-, vestuario y la cobertura de 114 vacantes. «Todo está presupuestado pero es un problema de gestión, el dinero se desvía», dijo, añadiendo que «no estamos negociando, sino exigiendo que se cumpla lo firmado».

En términos similares se pronunció el presidente de la sección sindical de los Policías Locales de Sevilla, Manuel Bustelo, que explicó que los agentes de seguridad locales «tienen algunos asuntos pendientes desde 2002». «El alcalde no cumple lo que firma, se llega a acuerdos y después deja que pase el tiempo», subrayó, añadiendo que ello es «el cuento de nunca acabar».

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