El Tribunal Supremo de Justicia Andaluz (TSJA) ha desestimado una reclamación de una vecina del centro de Sevilla que demandaba al Ayuntamiento que la indemnizase por una caída debido a «la gran cantidad de cera vertida en la calle por los nazarenos de la Semana Santa».

El TSJA ha considerado que la vecina, el ser residente de del casco histórico de Sevilla y conocedora de la Semana Santa «es consciente de que el vertido de la cera representa una de las consecuencias endémicas de los pasos» y que además, se trata de una sustancia que se ve a «simple vista» y se puede evitar con el «debido cuidado». Además, la mujer accidentada disponía de un corredor de paso seguro que optó por no usar.

El accidente se produjo el pasado año 2015 cuando la mujer caminaba por la plaza de la Encarnación, a la altura del Hotel Palace, y se cayó «debido a la falta de retirada de la gran cantidad de cera vertida en la calle por los nazarenos de la Semana Santa».

Pero al producirse la caída al día siguiente de la procesión, en medio de la calzada (la mujer no hizo uso de la zona peatonal), y al ser la vecina sabedora de que esa zona de la ciudad iba a tener cera, ha rechazado la indemnización.