La Consejería de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda ha adjudicado a la empresa Eiffage Energía SLU, por 1.024.946 euros, la obra para el reformado y la terminación del edificio de la calle San Roque número 22 en Sevilla, donde la Agencia de Vivienda y Rehabilitación de Andalucía (AVRA), propietaria del inmueble, comenzó a construir 17 viviendas protegidas que finalmente se van a convertir en 18 pisos del alquiler para jóvenes menores de 35 años con ingresos limitados. Los trabajos comenzarán a principios de septiembre, con un plazo de ejecución de 15 meses, y serán financiados con fondos propios de la Agencia.

El proyecto se abandonó casi a la mitad de completarse

La actuación en el edificio de la céntrica calle sevillana de San Roque quedó paralizada en 2007. Durante estos 15 años, la finca ha permanecido cerrada hasta que AVRA decidió en la recién terminada legislatura retomar la actuación modificando el proyecto para, en lugar de 17 viviendas, desarrollar en el edificio 18 pisos de alquiler que propiciarán un hogar a jóvenes con dificultad para acceder a vivienda por sus ingresos limitados.

Mientras se procedía a adaptar el proyecto, AVRA y el Ayuntamiento de Sevilla firmaron en noviembre de 2021 un convenio urbanístico para sacar este inmueble del Registro Municipal de Solares y Edificaciones Ruinosas, permitiendo con ello retomar la edificación en la parcela. Paralelamente, el Consejo Rector de AVRA aprobó el pasado año la continuidad de la actuación en el nuevo formato para 18 alojamientos.

Alojamiento para jóvenes menores de 35 años

De los 18 alojamientos en alquiler de régimen especial, seis se ubicarán en planta baja, ocho en la primera planta y los cuatro restantes, en la segunda o ático.

Todos los alojamientos tienen superficies útiles entre 25 y 45 metros cuadrados, salvo cuatro que están entre los 45 y los 70 metros útiles. Además, seis de los 18 alojamientos han sido diseñados para su uso por personas con movilidad reducida, aplicando la normativa de accesibilidad. Todos son de un dormitorio.

Los alojamientos se destinarán a jóvenes menores de 35 años cuyos ingresos sean iguales o inferiores a 3,0 IPREM, lo que quedará reflejado en la calificación. Las rentas máximas de alquiler serán del 4 por ciento anual del precio de referencia, que se convertirá en el 4,5 por ciento si los alojamientos se arriendan amueblados.

La renta media que habrán de abonar quienes resulten adjudicatarios de estos alojamientos se sitúa en torno a 259 euros, si bien los precios del alquiler oscilarán en función de la superficie de cada uno.