El alcalde de la ciudad sostiene que estos pueden mover 800 millones de euros y crear 8.000 puestos de trabajo en nuevas actividades y 18.000 en la construcción.
El alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, ha anunciado que se pondrá “a disposición” del Pacto por el Empleo en la capital un total de diez proyectos que pueden mover unos 800 millones de euros en los próximos cuatro años y que generarían unos 25.900 puestos de trabajo.
Durante su conferencia en el encuentro Nueva Economía Fórum Europa, Zoido ha subrayado que esos diez proyectos, que generarían 40 millones de euros en tasas y licencias, crearían unos 8.000 puestos de trabajo en nuevas actividades y otros 18.000 empleos en construcción.
Así, apunta a la “necesaria implantación” de la tienda de Ikea en Sevilla, “con el sometimiento a la ley”; la puesta en valor del edificio de la Gavidia “tras ocho años cerrado y que servirá para dinamizar comercialmente el entorno del centro”; el aprovechamiento de los espacios de Altadis y las naves de San Jerónimo como viveros de empresa; o la unión del eje entre la Catedral y la Plaza de España a través del Parque de María Luisa, para unir el casco histórico con la Sevilla de 1929.
Además, apunta al desarrollo de la Ciudad de la Justicia que, “tras 12 años esperándola, ahora parece que la culpa es del Ayuntamiento que tiene que decidir dónde va”. Así, recuerda que el Gobierno central y el Puerto de Sevilla tienen recurrido el convenio de Los Gordales, donde “la parcela de 6.000 metros sería insuficiente”. Sin embargo, deja claro que “no pasará esta legislatura sin que la Ciudad de la Justicia empiece a ser una realidad”.
El primer edil menciona igualmente la creación de aparcamientos en lugares públicos; el aprovechamiento de las “opciones” que otorga el Puerto de Sevilla con la ciudad, con turismo, el tratamiento de la ribera o la apuesta por la cultura y el deporte. También, apuesta por la reordenación de los servicios municipales, “ya que se prestan servicios en condiciones que no son dignas para los usuarios y para los funcionarios”; la reconstrucción de barriadas degradadas, “con la importancia de la iniciativa privada y de la empresa municipal del suelo Emvisesa; además de el desarrollo de nuevas infraestructuras deportivas, “algunas de la mayor calidad que haya en España”.
Zoido añade su apuesta por el desarrollo de el Parque Científico y Tecnológico Cartuja (PCT Cartuja), por la renovación de los parques industriales o por la puesta en valor de las naves del Barranco, junto con otros proyectos que “ya están en estudio para ponerlos encima de la mesa”.
“No se pagará” lo no acreditado en Fibes
En este marco, el alcalde hispalense recuerda que la situación del Palacio de Exposiciones y Congresos de Sevilla (Fibes) era “extremadamente alarmante”, con una obra “poco controlada y que al final ha llevado a la paralización por la discusión entre la constructora y la dirección de la obra”. “Voy a ser muy firme y exigiré responsabilidades hasta las últimas consecuencias de quien tengan la culpa del retraso de una obra estratégica para el turismo de congresos de Sevilla”, sentencia.
Zoido deja claro que la obra puede estar “parada más tiempo” y que el Consistorio va a “pagar todo lo acreditado y nada de lo no acreditado”. Así, exige “esfuerzos” a todas las partes implicadas.
Por otra parte, Zoido ha asegurado que existen “planes muy concretos a corto plazo” para el río Guadalquivir y apuesta por la creación de una zona franca, “que sólo necesita la firma del Gobierno”. Además, advierte de que el candidato a la Presidencia del Gobierno del PP, Mariano Rajoy, se ha comprometido a cumplir este punto.
“Hay que tener un proyecto que conecte y dé dinamismo a todo el Puerto. El río tiene que tener un plan específico y especial y son muchas las actuaciones a tomar, tanto deportivas, como de ocio”, insiste.
En este marco, ha insistido en la necesidad de que Sevilla “cambie el pesimismo por optimismo, recupere la ilusión y se vea la luz al final del túnel”, convirtiéndose en la “Bilbao de Iñaki Azcuna, la Madrid de Alberto Ruiz Gallardón, la Valencia de Rita Barberá o la Barcelona de Pasqual Maragall”.
Zoido ha recordado el desarrollo de las nuevas ordenanzas fiscales, que eliminan las tasas de licencia de apertura, “facilitando que vengan a invertir y potenciando la contratación” y apostando por la creación de “confianza y seguridad jurídica para atraer inversiones”. Así, apunta a la reorganización de la Gerencia Municipal de Urbanismo, que reducirá “drásticamente” el plazo en la concesión de licencias, “evitando la espera de hasta nueve años y medio sin poder disponer de un establecimiento”.