Los restos de estos represaliados por el franquismo han sido depositados en un nicho común y se trabaja en un monumento a las víctimas.
El director general de Memoria Democrática de la Consejería de Cultura, Francisco Javier Giráldez, ha informado hoy en rueda de prensa del resultado de los trabajos llevados a cabo en la exhumación de una fosa en el antiguo cementerio del municipio de La Campana (Sevilla), donde se han podido localizar los restos de 35 cuerpos. Durante su intervención, ha destacado que “estos trabajos han sido posibles gracias a la colaboración entre la Junta de Andalucía, el ayuntamiento y los familiares directos de las víctimas”.
Asimismo, Giráldez ha resaltado el ”excelente trabajo” y el”rigor científico” del equipo multidisciplinar encargado del proceso y en el que han participado la antropóloga forense Inmaculada López, las arqueólogas Carmen Romero e Inmaculada Carrasco así como especialistas en diversas áreas. En los trabajos de excavación arqueológica han colaborado también, y de forma voluntaria, estudiantes de la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla. Durante la presentación, el director general de Memoria Democrática ha explicado que se han localizado, exhumado, individualizado y realizado análisis antropológicos a los restos de los 35 cuerpos encontrados en una fosa con evidentes signos de violencia. En este sentido, ha agradecido la ayuda prestada por el Ayuntamiento de La Campana para poder llevarlas a cabo.
Una vez exhumados los restos de los represaliados por el franquismo, estos fueron depositados en un nicho en el actual cementerio de la localidad. A día de hoy se trabaja en la construcción de un monumento que contribuya al recuerdo y reparación moral de las víctimas de La Campana, ha explicado Giráldez.
En la presentación a los medios, Carmen Romero ha destacado “el apoyo de los investigadores locales” durante el proceso, mientras que Inmaculada Carrasco ha detallado los numerosos hallazgos que, junto a los testimonios de las familias e investigaciones anteriores, han permitido argumentar y documentar los resultados obtenidos. Por su parte, la antropóloga forense Inmaculada López ha indicado que, pese a la dificultad para realizar los registros antropológicos debido al estado de los restos y a las propias características de la fosa, “ha sido posible localizar 35 personas, en su mayoría hombres y de edades comprendidas entre los 20 y 40 años”.