Las bengalas y los botes de humo alumbraron una de las mejores noches de toda la historia del Sevilla

Los aficionados sevillistas que vayan al partido de este martes de la Liga de Campeones entre el Lens y el Sevilla FC se arriesgan a una pena de cárcel de 6 meses y a una multa de 30.000 euros. Este acontecimiento se daría a causa del decreto publicado esta semana por la Prefectura del Pas de Calais (norte).

Esta orden, subida a la página de los servicios estatales del Pas de Calais, prohíbe la presencia de «los hinchas del Sevilla o a los que se comporten como tal» desde las 10:00 horas del martes 12, hasta las 3:00 horas del miércoles 13 en varias zonas de la ciudad de Lens y sus alrededores.

La Prefectura sostuvo que esta prohibición se debe a «un riesgo real y serio de enfrentamiento entre los hinchas de ambos clubes». En el caso de incumplimiento, la orden contempla la aplicación de las sanciones correspondientes previstas en la ley del Deporte, de hasta 6 meses de cárcel y una multa de 30.000 euros.

La disposición se conoció después de que este domingo el ministro de Interior francés, Gérald Darmanin, anunciara en una entrevista que iba a prohibir la llegada de los aficionados del club español a Lens. Esta acción forma parte de las medidas que está adoptando el Gobierno para tratar de atajar la galopante violencia en el fútbol francés, que a comienzos de este mes de diciembre dejó un aficionado muerto, o que hace varias semanas mostró al mundo entero que ni los integrantes de los clubes, como le pasó a Fabio Groso, entrenador del Olympique de Lyon, están a salvo de las acciones de los ultras.

Recurso del club ante la prohibición a los sevillistas

La noticia ha sido recibida con asombro en Sevilla, y es que se calcula que entre 300 y 400 hinchas del equipo rojiblanco iban a desplazarse al estadio Bollaert-Delelis.

Ante estas medidas, el Sevilla FC anunció este lunes la presentación de un «recurso urgente», junto con la Asociación Nacional de Aficionados de Francia, contra las resoluciones del Gobierno galo y de la Prefectura de Pas-de-Calais de prohibir la presencia de aficionados sevillistas en su partido de la Liga de Campeones en Lens. Con esta apelación, el club pretende que queden sin efecto esas prohibiciones gubernativas decretadas por las autoridades francesas.

Por su parte, José Castro, presidente del Sevilla, calificó de «atrocidad» la prohibición del Gobierno francés a que los seguidores del conjunto sevillano acudan al encuentro de este martes.