Tantos silbaban en Berlín las canciones de ‘La ópera de tres peniques’ / ‘La ópera de cuatro cuartos’, éxito de 1928, texto de Bertolt Brecht, música de Kurt Weill, obra que ambos firmaron juntos y que nunca sería lo que es y ha sido sin alguno de los dos. Kurt Weill (1900-1950) es recordado ahora por Vicky Peña que, acompañada del piano (Jordi Camell) recuerda temas míticos como ‘La balada popular de Mackie Cuchillo’ o ‘Alabama song’.


Miguel Ybarra Otín
. Con su particular voz, profunda, Vicky Peña canta e interpreta (martes pasado en el Lope de Vega) en su espectáculo ‘De Mahagonny a Youkali, un viaje con Kurt Weill’. La catalana -Premio Nacional de Teatro 2009 y que lleva años viajando con esta obra- va narrando la vida del autor alemán desde que a los 17, con los músicos en la guerra y las orquestas vacías, empezó a darse a conocer.

El primer tema fue ‘Bilbao’, donde “por un dólar tenías todo lo que querías”. Aunque no eran tiempos fáciles los de Weill, que puso acordes a letras más comprometidas de Brecht (‘¿Qué le mandó el soldado a su mujer?’) y a otras también melancólicas, no precisamente por la guerra sino por la fugacidad de la vida (‘Nanna’s lied’: “¿dónde están las nieves de antaño?”, dice la letra. Ésta cantada en francés, otras en alemán o castellano).

De Brecht son muchos textos: a la obra teatral ‘Ascensión y caída de la ciudad de Mahagonny’ pertenece el tema ‘Alabama song’ (por tantos interpretado, entre ellos también The doors, “Oh, show us the way to the next whisky bar / Oh, don’t ask why, oh, don’t ask why!”). También de Brecht es ‘La balada popular de Mackie Cuchillo’ (añadida al final a ‘La ópera de tres peniques’ y que resultó fundamental). Lotte Lenya, voz en muchas de las canciones, papel de Polly en esta ópera, fue una incondicional de los dos autores, casada con Weill y así por ello, también, víctima de la… ‘Balada de la tiranía sexual’.

Lenya y Weill huyeron juntos a París desde la Alemania nazi, donde se acusaba al músico de colaborar con los comunistas. Lenya le acompañó a pesar de haber ya decidido divorciarse: ‘Je ne t’aime pas’, tema que canta Vicky Peña con su estilo de poca melodía, recitando como también Edith Piaf hacía.

Y así se narra la vida de Kurt Weill hasta los 50 en que murió. Renovador -con Brecht- del Songspiel, revitalizador del Kabarett, será siempre recordado por magníficos temas cuyos estribillos ahora pocos silbaron, un martes de lluvia en Sevilla, al salir de un escenario medio lleno, medio vacío.

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