Los andaluces nos gastaremos una media de 85 euros en las rebajas, un 5% más que en las rebajas de invierno del año pasado.
Enero se conoce como el mes en el que las familias tienen que apretarse el cinturón después de todos los gastos navideños. Según la Federación de Usuarios-Consumidores Independientes (FUCI), los andaluces nos gastaremos una media de 85 euros en las rebajas de invierno, un 5% más que en las del año pasado. Esto lo ha constatado una encuesta que ha realizado la FUCI a nivel nacional durante el mes de diciembre para conocer cuánto dinero se van a gastar los españoles en las rebajas. Los productos que más se van a comprar serán los derivados del textil, calzado, complementos y productos relacionados con las nuevas tecnologías, entre otros.
El presidente de FUCI, Gustavo Samayoa, considera que “el hecho de que este año el gasto aumente se debe en parte a que son muchos los consumidores que están esperando a los descuentos para comprar productos que en temporada no pueden comprar debido a que sus economías no permiten hacer frente a los precios. Pese a la liberalización de las rebajas, los españoles son fieles a la tradición de las rebajas y han esperado conscientes de que el porcentaje de descuento en esta fecha será mayor, especialmente en los artículos de textil, debido a la estacionalidad de la moda”.
La FUCI ha tomado la iniciativa de realizar unas recomendaciones al consumidor para ahorrar en sus compras en este mes de enero. La más importante de todas es fijar un presupuesto y hacer una lista de las compras necesarias para no hacer un consumo extra. A la hora de hacer la compra hay que revisar con atención la etiqueta de la prenda en la que debe figurar la talla, la composición y el tratamiento aconsejable de lavado. Y el producto debe llevar tanto el precio rebajado como el anterior, o en su defecto, el porcentaje de rebaja sobre el original.
Con la generación del Real Decreto 20/2012 las asociaciones de consumidores se han visto obligados a realizar unas recomendaciones para que respeten el derecho de los consumidores. La Asociación Consumidores Al-Ándalus ha publicado unas recomendaciones para que no se vean “rebajados” los derechos de los consumidores y conozcan las pautas necesarias que se tiene que llevar a cabo a la hora de realizar la compra.
Una de las recomendaciones que realiza es que el establecimiento debe de disponer de existencias suficientes de productos; no puede anunciarse la venta en rebajas cuando afecte a menos de la mitad de los productos o artículos ofrecidos, tanto en la publicidad como en la información ofrecida a los consumidores se debe indicar claramente la fecha de inicio y finalización de las rebajas; cuando se efectúen ventas en rebajas, de saldo o en liquidación, deberán aparecer debidamente separadas con diferenciación de los espacios dedicados a cada una de ellas; el consumidor deberá informarse de la política de devolución del comercio, es decir, si admite cambios o no, y qué tipo de devolución. Toda esta información debe estar suficientemente detallada en el interior del establecimiento o en el ticket de compra, donde debe establecerse el plazo máximo para devolver el producto. Si se detecta algún desperfecto en el artículo, el comercio tiene la obligación de practicar la devolución.
Además, la Unión de Consumidores de Andalucía quiere iniciar una campaña informativa a través de las redes sociales sobre este periodo de ventas con el fin de que los consumidores estén plenamente conscientes de lo que son sus derechos en esta época. En concreto, se realizará a través de las redes sociales que la organización tiene abiertas tanto en Facebook como en Twitter y en la página web www.uniondeconsumidores.com.
Rebajas, ¿un periodo de empleo?
La Federación de Comercio, Hostelería y Turismo de CCOO Andalucía ha afirmado, asimismo, que las rebajas no crearán empleo en el comercio andaluz por quinto año consecutivo. También ha señalado que en este tiempo, sólo en 2013, se han perdido 8.886 empleos. CCOO ha apuntado que la liberalización del periodo de rebajas supone «un perjuicio para el pequeño comercio, una minoración de las garantías del consumidor, generan incertidumbre y riesgos y suponen una merma del derecho a la información en relación a este tipo de ventas». También ha asegurado que durante las rebajas se va a mantener un gasto previsto como consecuencia de mala situación económica que viven las familias.
El sindicato ha pedido «más generosidad» a los empresarios a la hora de reforzar las plantillas, ya que «como ha sucedido en años anteriores, no se va crear empleo». En ese sentido, el sindicato ha lamentado que la «grave» crisis económica que atraviesa Andalucía, como «consecuencia de las políticas económicas establecidas por los gobiernos bajo el argumento falaz de la austeridad, se está traduciendo en menos empleo, más paro y peores condiciones laborales».
Los límites traspasan la frontera
En épocas de rebajas se hace mucho marketing con los descuentos en los productos, pero se ha comprobado que el precio de los productos vale más con el descuento que con su precio original. La organización FACUA ha denunciado los abusos que cometen los comercios a los consumidores con la publicidad engañosa.
FACUA ha publicado que las grandes superficies comenzaron asegurando que sus productos tenían descuentos del 50% y lo incluían delante un microscópico «hasta». El poco control de las autoridades ha hecho que el pequeño comercio se suba el carro también de la publicidad engañosa. Esta organización que defiende los derechos de los consumidores anuncia que no son las campañas publicitarias engañosas en prensa, radio, televisión y escaparates, sino el falseo de precios en las etiquetas.
“Hay firmas que modifican el importe que tenían originalmente los productos para hacernos creer que en rebajas tienen un enorme descuento. Hasta puede que el precio supuestamente rebajado sea en realidad el que había marcado siempre la etiqueta”.
FACUA ya ha denunciado estos abusos y fraudes en los descuentos de las rebajas en dos grandes marcas españolas de productos textiles. También llama a las inspecciones publicitarias de los establecimientos, que “tienen que velar por el cumplimiento de la ley y nunca se la han leído o todavía no han visto ninguno de esos reclamos publicitarios que, hoy por hoy, utilizan once de cada diez comercios en rebajas”.