El ‘Risitas’, uno de los símbolos del humor andaluz desde principios de este siglo nos acaba de dejar. Juan Joya Borja fallecía al mediodía de este miércoles en el Hospital Virgen del Rocío al no superar una enfermedad. Este conocido humorista residía en el Hospital de la Caridad desde septiembre de 2020, donde ingresó después que le amputaran una de sus piernas.
Vecino del Polígono de San Pablo, y parroquiano de la taberna ‘Quitapesares’, este conocido personaje, descubierto por el periodista Jesús Quintero, gracias al ya fallecido cantaor Pepe ‘Perejil’, llenó de humor e historias estrambóticas los hogares andaluces en sus apariciones en el programa ‘El Vagamundo, y posteriormente en ‘Ratones Coloraos’.
Primera aparición del ‘Risitas’ en televisión
Son muchas las historias que el ‘Risitas’ relataba desde su primera aparición en televisión, allá por el año 2000 en el programa del ‘Loco de la Colina’. Un joven Juan Joya aparecía junto a su amigo Pepe ‘Perejil’, quien lo definía como una «auténtica joya».
La primera carcajada de este conocido humorista la soltaba como respuesta a la pregunta del ‘Loco de la Colina’ del porqué le llamaban así. «Porque me río mucho» espetaba Juan con una sonrisa que todavía no estaba abrigada por su característico bigote.
El propio Jesús Quintero relataba en sus memorias que rápidamente se dio cuenta del genio humorístico que tenía en frente. «Comprendí automáticamente que me encontraba, no solo ante un fenómeno de la naturaleza, sino también ante uno de los más grandes fenómenos mediáticos de los últimos años. Bastaron un par de apariciones en el ‘Vagamundo’ para que se convirtiera en el rey del zapping.»
Juan se convirtió en un habitual en el programa de Jesús Quintero. Las entrevistas, la mayoría surrealistas, mantenían al espectador pegado al televisor en busca de historias de un personaje al que no le gustaba mucho trabajar.
Los sacos de cemento
Una de las historias más recordadas por los espectadores es la que llevó al ‘Risitas’ a descargar un camión de sacos de cemento. Juan acudía a la oficina del paro a buscar trabajo cuando una persona acudió buscando gente para descargar «un tráiler de botellas de aceite».
Buscaban a cuatro personas para descargar este camión a razón de 20.000 pesetas por la jornada de trabajo. Cuando llegó al lugar se percató de que no eran botellas de aceite, sino sacos de cemento lo que tenían que descargar.
«Cuando quitamos el toldo del camión vimos 600 sacos de cemento, y la mujer nos dijo que de aquí no se iba nadie». La carcajada tanto de Jesús Quintero como de su «cuñao» ‘Peito’ quedarán en la memoria como una de las más recordadas.
‘Risitas’ y las paelleras
Sin duda una de las intervenciones más recordadas de Juan es la vez que relató la historia de las famosas ‘paelleras’. El ‘Risitas’ se trasladaba a Chipiona para trabajar la temporada de verano en un restaurante de la localidad gaditana.
El encargado del restaurante le pidió que atara las paelleras a la arena junto a la orilla para que la sal del agua las limpiara. Cuando llegó a la mañana siguiente solo encontró una, pues las demás se las había llevado la corriente. Sin duda una de las carcajadas más vistas de la televisión en los últimos 20 años, y que resulta tremendamente contagiosa.
Su «cuñao» ‘Peito’
El éxito de Juan en la televisión no se puede explicar sin la existencia de un personaje que le acompañó durante gran parte de su andadura por la televisión. Antonio Rivero Crespo, conocido popularmente como ‘Peito’ se convirtió en su acompañante en las noches del ‘Vagamundo’, y en su particular «cuñao» como se llamaban mutuamente.
Este particular personaje, que cada vez que reía asomaba el único diente que poseía, se convirtió en el consorte imprescindible en sus apariciones. Sus conversaciones, sus bromas a Jesús, o sus apariciones junto a ‘Tito Triana’, conformaron la edad de oro de estos personajes en la televisión pública andaluza.
Juan Joya nos dejaba este miércoles para reunirse con su «cuñao» quien fallecía el pasado año 2003, para volver a conformar uno de los mejores dúos humorísticos allá donde estén.