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El barrio sevillano de Torreblanca, originalmente conocido como Torreblanca de los Caños, se encuentra en la periferia oriental de la ciudad. Está atravesado de este a oeste por la autovía A-92, que conecta con la provincia de Málaga, y de norte a sur por el Canal del Bajo Guadalquivir. Torreblanca limita con los términos municipales de La Rinconada, Carmona y Alcalá de Guadaíra.
La historia de este barrio se encuentra documentada en el libro «Los Patronatos de Casas Baratas en Sevilla», que resume los resultados de la tesis doctoral del arquitecto Ramón Queiro Quijada y es editado por el Instituto de la Cultura y de las Artes de Sevilla (ICAS).
Hoy en día, ambas organizaciones continúan existiendo, aunque han evolucionado hacia dos nuevas entidades: El Real Patronato, fundado por Alfonso XIII en 1913, se ha convertido en la Real Fundación Patronato de la Vivienda. Por otro lado, el Patronato Municipal se ha transformado en la Empresa Municipal de Vivienda, Suelo y Equipamiento de Sevilla, conocida como Emvisesa.
El primer censo de Torreblanca data de 1910
El primer censo de Torreblanca data de 1910 y muestra que el barrio surgió con el propósito de abordar una problemática arraigada de chabolismo y urbanismo marginal en esta área de la ciudad. Además, tenía la intención de reubicar a las familias que vivían en las chabolas del Vacie. El proyecto fue diseñado por el arquitecto Fernando Barquín y llevado a cabo por el Real Patronato de Casas Baratas de Sevilla (RPCBS).
La comunidad de Torreblanca se formó a finales del siglo XIX debido a la actividad industrial en la zona. En el primer censo anteriormente mencionado se registraron veintiún edificios y ochenta y un habitantes en la zona.
En 1953, un informe del Jefe Técnico de Sanidad resaltó las deficientes condiciones higiénicas del barrio, señalando la falta de acceso a agua potable y alcantarillado.
En 1959, se describió a Torreblanca de los Caños como un grupo de casas a ambos lados de la Carretera de Alcalá, con una población de entre diez y doce mil habitantes que vivían en condiciones precarias.
Los terrenos adquiridos por el RPCBS estaban adyacentes al núcleo antiguo de Torreblanca y se conocieron posteriormente como «Torreblanca la Nueva». El proyecto tenía como objetivo crear un núcleo urbano lo suficientemente significativo como para influir en el crecimiento desordenado de esta parte de Sevilla.
Primera fase de 1080 viviendas
El proyecto contemplaba la construcción de un total de 1608 viviendas, así como los servicios públicos necesarios. La primera fase involucraba 1080 viviendas. Una característica novedosa fue la inclusión de viviendas unifamiliares de dos plantas, que era la tipología predominante en el asentamiento informal.
En cuanto a la infraestructura vial, se diseñó un circuito cerrado con un único acceso desde la carretera de Alcalá, con espacio reservado para la iglesia, escuelas, guardería y centro cívico, aunque estos se construirían posteriormente.
Se ofrecieron dos tipos de viviendas: la mayoría (1008) en bloques de cuatro plantas con sala de estar, cocina incorporada, cuarto de aseo y tres dormitorios, y un segundo tipo de viviendas unifamiliares de dos plantas con patio trasero.
Torreblanca, inaugurada por Franco en 1961
En abril de 1960, el Ayuntamiento aprobó un presupuesto de 6.000.000 de pesetas para la urbanización de las obras, a cambio de que el propietario cediera gratuitamente los terrenos para la construcción de las viviendas por el RPCBS.
El Patronato no tenía como objetivo principal la planificación urbana, sino la construcción de viviendas asequibles en terrenos disponibles. Sin embargo, sus proyectos, como Torreblanca, contribuyeron significativamente al crecimiento de la ciudad hacia el este.
Una segunda fase de 528 viviendas se planteó en 1961, como parte del Plan de Absorción de Suburbios, y se desarrolló en un diseño simétrico alrededor de un espacio central.
El proyecto original de Torreblanca también incluía la construcción de una iglesia, una estación de autobuses, locales comerciales, un centro social, cines, zonas deportivas, guardería y un grupo escolar. Sin embargo, muchos de estos elementos nunca se llegaron a construir. El 24 de abril de 1961, Franco inauguró la nueva barriada de Torreblanca durante la Feria, entregando llaves simbólicas a los vecinos del Vacie.