El Puente del Centenario de la capital hispalense, que finalizará, teóricamente, en 2025, lleva en medio de un proceso de obras varios años, en los que el presupuesto de estas tareas de mantenimiento y mejora de infraestructuras ha cambiado en repetidas ocasiones. Por otra parte, no es este el primer retraso que ha hecho que se prolonguen estas modificaciones, suscitando la polémica.
Originalmente, las obras del Puente Centenario, que durarán hasta el mencionado 2025, tenían una fecha de finalización acordada de cara al próximo 2024. No obstante, y como venía vaticinando la lenta evolución de dicho proceso de mantenimiento, esta fecha se ha pospuesto y se le ha sumado un año más al periodo de obras, como veníamos mencionando.
La tardanza, asimismo, no es el único contratiempo que enfrentan los constructores encargados de este proyecto. También se ha complicado el precio de los materiales utilizados, a causa de la inflación severa que afecta al mercado del acero. Por este aumento, también crecerá el presupuesto designado en algo más de 100 millones de euros.
Tras un análisis del mercado de materias primas, sin embargo, este planteamiento flaquea, ya que el repunte de precios del acero que justifica el encarecimiento del proceso se produjo en el pasado 2022, y ya se ha estabilizado.
Preocupa también a la población hispalense, así como a los constructores encargados y al Ayuntamiento, que no se haya progresado en el apartado más complicado de estas obras. La costilla de acero que reforzará el tablero de este puente, de 4,5 millones de kilos, aún no se ha fabricado, y se trata de un elemento indispensable para concluir con el proceso de mantenimiento y mejoría del puente.