La Fundación contra el Terrorismo y la Violencia Alberto Jiménez-Becerril ha distinguido hoy a Teresa Barrio Azcutia, madre del concejal del Ayuntamiento de Sevilla que, junto a su esposa, Ascensión García Ortiz, fueron asesinados por la banda terrorista ETA en 1998.

El Patronato de la Fundación ha acordado conceder este año este premio a Teresa Barrio Azcutia por su implicación por preservar la memoria, la dignidad y la justicia de las víctimas del terrorismo. Con este reconocimiento se ha querido rendir homenaje, además, a todas las madres y abuelas, víctimas del terrorismo, que han criado a sus hijos y nietos en ausencia de alguno o de ambos progenitores, quienes fueron tristemente asesinados en atentados terroristas y a las que tanto debe la sociedad española.

Asimismo, la Fundación ha hecho también hoy entrega de una mención especial a Concepción López Barrera, una de las miles de víctimas anónimas de la barbarie terrorista y viuda de Antonio Marín Gamero, guardia civil de 27 años, asesinado junto a otros cinco en atentado terrorista el 1 de febrero de 1980, en Ispaster (Vizcaya). El asesinato de estos seis guardias civiles provocó una gran conmoción en la sociedad española y propició que el presidente Adolfo Suárez crease una Delegación Especial de Seguridad para el País Vasco y Navarra.