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CCOO demanda una oferta de empleo plurianual a desarrollar en esta legislatura para garantizar el servicio público postal a los ciudadanos y el rescate de la plantilla perdida. También se presentarán desde Huelva. 

El domingo 27 de noviembre más de 120.000 aspirantes en toda España intentarán conseguir uno de los 1.606 empleos fijos ofertados para trabajar en Correos, en la que será la primera convocatoria de empleo en la empresa desde hace ocho años.

De ellos, 9.892 aspirantes de las provincias de Sevilla y Huelva se examinarán en las facultades de Derecho, Empresariales, Ciencias del Trabajo y Enseñanza de la Universidad de Sevilla ubicadas en la zona Viapol, en un examen que dará comienzo a las 10:00 horas.

CCOO, sindicato mayoritario en Correos, ha apuntado que en 2008 se produjo la última convocatoria de empleo fijo en Correos, ocho años en los que la empresa postal ha reducido su plantilla en más de 15.000 efectivos, 400 de ellos en Sevilla al no reponer jubilaciones, salidas de parte de sus trabajadores y trabajadoras a otros ministerios y también reduciendo notablemente el número de contrataciones temporales, precarizando el empleo.

CCOO recuerda que esta convocatoria, incorporada de forma singular en el ámbito del sector público, con una enmienda específica aprobada por el Gobierno en febrero de 2015, ha sido fruto de una movilización sin precedentes en la historia de Correos impulsada por este sindicato, con centenares de acciones de protesta en toda España que culminaron, precisamente un 27 de noviembre, en 2014, con una huelga general y más de 20.000 trabajadores y trabajadoras en Madrid llegados de toda España para mostrar su rechazo ante el enorme recorte de empleo, de derechos y de salario padecidos desde 2010.

Con estos precedentes, CCOO, aún valorando cualquier iniciativa que consolide empleo para reforzar el servicio público postal, ha calificado la convocatoria de claramente insuficiente para reponer el empleo destruido en los últimos años y solucionar las consecuencias que dicha situación ha provocado, como son -en el ámbito interno- la precarización de las condiciones laborales y un incremento insostenible de las cargas de trabajo y -para la sociedad, a consecuencia de lo anterior- el deterioro constante de un servicio público como el postal del que dependen ciudadanos, empresas y administraciones.