Imagen de una citometría de flujo

El Hospital Virgen Macarena centra sus esfuerzos en la lucha contra los tumores líquidos. Estos tumores en estado líquido tiene su origen en la producción de glóbulos blancos defectuosos. En estas afecciones sanguíneas la médula ósea, tejido esponjoso que se encuentra dentro de los huesos y encargado de producir células sanguíneas, reproduce glóbulos blancos inmaduros.

Contra este tipo de enfermedad lucha día a día la Unidad de Oncohematología del Virgen Macarena. Para combatirlo, desde el centro hospitalario hacen hincapié en tres pilares fundamentales: la detección precoz, la aplicación de tratamientos cada vez más efectivos y la investigación.

El Virgen Macarena, para la detección temprana de los tumores líquidos, utiliza la teleconsulta, que permite coordinar con Atención Primaria la asistencia y derivación de casos sospechosos con la mayor rapidez posible. Por su parte, en el apartado terapéutico se indaga cada vez más en una medicina personalizada, donde sobresalen las terapias dirigidas y la inmunoterapia.

Alicia Rodríguez, directora de la Unidad de Hematología del Hospital Universitario Virgen Macarena, asegura que se ha avanzado mucho «sobre todo, en las leucemias crónicas, tanto en la mieloide como en la linfática crónica, pero también en el mieloma múltiple».

La aplicación de terapias cada vez más efectivas es el principal caballo de batalla del centro hospitalario contra los tumores líquidos. De ahí que la investigación sea una constante en el Servicio de Hematología del Hospital Universitario Virgen Macarena.

Más allá de toda la cuestión clínica, para este servicio es muy importante el lado humano de este paciente oncológico, cuyo seguimiento por parte del Servicio de Hematología se prolonga toda la vida. De ahí viene, según la doctora Rodríguez, la íntima relación que mantienen con distintas asociaciones.