La Policía Local ha desalojado a lo largo de la mañana de hoy 7 de marzo parte de los puestos del tradicional mercadillo del Jueves de la calle Feria. Los vendedores se quejan de que no ha existido siquiera aviso por parte del Ayuntamiento.
Decenas de puestos situados en los aledaños de la calle Feria han sido desmantelados para, según la versión oficial, garantizar una correcta evacuación y evitar que el mercadillo se extienda más allá de la calle, como lo venía haciendo en los últimos años.
El Jueves tiene más de 800 años y casi dos centenares de vendedores asociados, aunque solo pueden poner sus puestos algo más de una centena, para no excederse en el terreno que tienen asignados según un Convenio de 2010. Tras una reunión reciente con el Ayuntamiento, estas cifras han quedado en entredicho, al entender el Consistorio que se estaba rebasando la extensión acordada. Los vendedores, sin embargo, denuncian que la decisión de desmantelar parte del mercadillo se ha tomado unilateralmente y sin previo aviso.
El Ayuntamiento ha informado de que la intervención de la Policía se ha enmarcado en el proceso de adecuación del Mercadillo a «criterios de accesibilidad, seguridad y convivencia con residentes y comerciantes del barrio», y afirman que se dio de plazo hasta este 7 de marzo para que los propios vendedores se reorganizasen para situar correctamente el máximo de 124 puestos que se marcó en el Convenio de 2010 y que firmaron tanto la Gerencia de Urbanismo como la Asociación Mercadillo Histórico Popular. «Esta medida se adopta después de que en los últimos años se haya detectado una situación de descontrol en cuanto al número de puestos, y los artículos que se venden, que venía generando problemas de convivencia graves en el barrio», se ha expuesto desde el Consistorio.
Ante estas circunstancias, los asociados avisan de próximas actuaciones para tratar de revertir la situación, ya que con los límites que se les ha impuesto, defienden, no caben los 124.