El Sevilla afronta la vuelta de los octavos de final de la Europa League teniendo claro que su quimera más temida, en esta ocasión, es la relajación.
Y es que, como a Emery le gusta incidir, estas citas son de 180 minutos y no de 90. Aunque sería absurdo negar lo evidente, el Sevilla afronta esta cita bastante más aventajado que su rival. El 1-3 de El Madrigal colocó pie y medio blanquirrojo en los cuartos dirección Varsovia. Además, el ambiente en el Pizjuán se presume inmejorable tal y como viene siendo costumbre en estas cruzadas, por lo que el Sevilla buscará no sólo el pase sino además prolongar esa racha de un año sin conocer la derrota en casa.
Ante él uno de los equipos más en forma de los últimos meses, el Villarreal, que no desistirá en ningún momento en sus intentos de remontar el resultado de ida. Por lo que el respeto mutuo será palpable en el terreno de juego. Para evitar relajaciones, Emery contará con su equipo de gala exceptuando a Krychowiak, sancionado, que será sustituido por Banega, el cual se encuentra en un gran momento de la temporada, que formará el trivote con Mbia e Iborra. Mientras que todo parece indicar que Vitolo finalmente sí pueda estar listo para esta noche.
En definitiva, once de gala sin miramientos al próximo encuentro liguero, que será precisamente ante los castelloneneses, para premiar al sevillismo con, mínimo, una fase más en la competición favorita de Nervión. A pesar de las condiciones meteorológicas se prevé que el estadio roce el lleno ya que el Villarreal ha viajado bien escoltado con 2.000 aficionados amarillos que empujarán hasta el final a Marcelino y su tropa.
Tres o más goles debe endosar el Submarino al Sevilla si pretende remontar. Marcelino tiene la baja de última hora del ex sevillista Cheryshev con una rotura fibrilar, una baja importante ya que el centrocampista es de los mejores jugadores de la plantilla castellonense.
Tampoco se ha podido recuperar a tiempo Víctor Ruiz, quien sigue con unas molestias musculares; mientras que el lateral izquierdo Jaume Costa es baja por sanción. Por contra, destaca la vuelta al equipo del centrocampista Tomás Pina, quien tras un partido de sanción. Con su presencia, el Villarreal gana centímetros y fuerza en el juego aéreo, que tanto daño le hizo en el partido de ida.