Sevilla - Alavés / SFC

Cayó el Sevilla FC en una red defensiva perfectamente tejida por el Deportivo Alavés esta tarde en el Ramón Sánchez-Pizjuán, que solo se vio sobrepasada con un penalti que decretó el colegiado por una mano en un centro de Jesús Navas.

Durante todo el choque se mostraron muy sólidos los alavesistas, que incluso lograron adelantarse en el marcador con la segunda mitad ya avanzada y que no permitió a los nervionenses sentirse cómodos y poder realizar un fútbol vistoso y ofensivo durante prácticamente los noventa minutos de juego.

Primera parte muy monótona en el Ramón Sánchez-Pizjuán, que hasta los primeros veintidós minutos no vio el primer remate a portería, un leve remate de cabeza de De Jong tras un saque de esquina. El Sevilla FC dominaba la posesión y circulaba el balón de lado a lado buscando las llegadas por bandas, pero el buen sistema defensivo del Alavés lo hacía imposible, además de impedir a los blanquirrojos imponer un ritmo propicio para generar velocidad o desajustes en la zaga babazorra. Ya casi en el tiempo de descuento, Vaclík evitaba que Joselu adelantase a su equipo con una grandísima intervención con el pie en un mano a mano, en la primera y única llegada visitante hasta el momento.

Salió el Sevilla convencido del túnel de vestuarios a modificar varios aspectos de su juego que no estaban permitiendo generar incertidumbre a un Alavés que deambulaba muy cómodo por la capital hispalense. Lopetegui introdujo dos cambios muy pronto, uno de ellos era el debut de Suso, que desde el primer minuto se mostró muy participativo en la banda derecha y metiéndose hacia dentro para asociarse con Banega y Franco Vázquez. En un córner, Koundé pudo adelantar a los nervionenses con un remate de cabeza que se marchaba muy cerca del palo izquierdo de Pacheco.

Sin embargo, los blanquiazules, que únicamente se defendían de su rival, se adelantarían en el luminoso. Una falta lanzada por Camarasa desde el costado izquierdo la cabeceaba Manu García al dentro del área pequeña, donde Vaclík sacaba un guante y la dejaba muerta para que Joselu la empujara a placer. Había que remar más de lo inesperado, y la reacción no se hizo esperar. Con tan solo cinco minutos transcurridos, Jesús Navas ponía un balón que daba en la mano de Duarte, decretando la pena máxima el colegiado y ejecutando y conviertiendo Ocampos, que devolvía las tablas y la ilusión por embolsar los tres puntos en juego.

Pero no hubo más para el Sevilla. Los quince minutos que restaban para el final del partido se esfumaron demasiado rápido, sin que los blanquirrojos pudiesen disponer de alguna jugada de peligro que volviese a inquietar los intereses alavesistas, que continuaron muy sólidos pese a haberse visto empatados. El Sevilla, de esta forma, cede la cuarta plaza al Getafe, pese a estar empatados a puntos con el plantel madrileño. La semana que viene los de Julen Lopetegui se desplazan hasta Vigo para visitar al Celta, el domingo a las 18.30 horas.