El pasado día 18, la patrulla de la Guardia Civil de El Castillo de las Guardas, se encontraba circulando por la carretera nacional 433 kilómetro 52,5, y observó cómo un vehículo perdió el control e irrumpió en el carril contrario, por el que circulaban los agentes, quienes tuvieron que esquivarlo para no colisionar con él. Posteriormente, el turismo se salió de la vía y dio varias vueltas, quedando con las ruedas hacia arriba en el talud de la nacional, sentido Aracena.
Los guardias civiles dieron rápidamente la vuelta para auxiliar a los posibles heridos. El vehículo estaba ocupado por una sola mujer, la conductora, atrapada y cubierta de sangre, ya que el techo estaba hundido.
Mientras los agentes buscaban la forma de auxiliarla, por la zona del motor comenzó a salir cada vez mas humo. Dada la gravedad de la situación y la urgencia de sacar a la herida del turismo, los agentes tuvieron que actuar rápido ya que temían que el vehículo comenzase a arder. Mientras uno de los guardias civiles rompió los cristales de las puertas del lado del conductor, para el auxilio de la herida, el otro cogió el extintor del vehículo oficial y evitó un posible incendio del vehículo.
Posteriormente, entre los dos agentes, a base de patadas y tirones con sus manos, consiguieron, con dificultad, abrir la puerta del conductor, se introdujeron en el interior del turismo y pudiendo ayudar a la mujer herida a salir.
Esta persona tenía varios cortes en brazos y manos y un fuerte golpe en la cabeza y fue trasladada en ambulancia a un hospital.