La Guardia Civil ha imputado al encargado de una chatarrería por un supuesto delito de Receptación, al comprar material de latón procedente de un robo y revenderlo.
Los trabajadores de una finca del término de Puebla del Río comunican a la Guardia Civil que personas desconocidas habían sustraído parte de un caballo de latón que estaba expuesto en la misma. Al parecer, al no poder sustraerlo en su totalidad, comenzaron a destrozarlo a hachazos y se llevaron las piezas. Los trabajadores acudieron al lugar al escuchar fuertes golpes, pero cuando llegaron, los los autores se dieron a la fuga con parte de su botín.
La Patrulla del SEPRONA de Puebla del Río comienza a indagar en las chatarrerías cercanas. El titular de una de ellas, les comenta a los agentes que un chatarrero autorizado, le acaba de vender unas piezas de latón que pudieran ser las que buscan. Efectivamente, los agentes comprueban que se trata de trozos de latón muy parecidos al material del que estaba hecho el caballo destruído. Las piezas están cortadas en trozos pequeños, presumiblemente para mayor comodidad al trasladarlas. En total pesan 115 kilogramos.
La Guardia Civil solicita la factura de compraventa en la que se refleja los datos del vendedor y se entrevista con el chatarrero que vendió estas piezas. Esta persona niega haberlo hecho y se contradice, por lo que levanta sospechas en los agentes.
Finalmente se consiguen las pruebas necesarias y se imputa al titular de la chatarrería, J.E.G. por un supuesto delito de Receptación.