El regidor provincial ha valorado esta mañana las cuentas autonómicas, que ‘aunque se congelan, vuelven a hacerle contraluz a las políticas del gobierno central’.
‘Valientes a la hora de afrontar con garantías los compromisos adquiridos y sensibles hasta el punto de destinar ocho de cada diez euros a políticas sociales’. Esa es la valoración principal que el presidente de la Diputación, Fernando Rodríguez Villalobos, ha hecho del proyecto de presupuestos autonómicos que ayer mismo aprobaba la Junta en Consejo de Gobierno y que recibirá el Parlamento el próximo viernes.
Según el mandatario provincial, ‘una vez más, la Junta de Andalucía hace contraluz en la elaboración de sus cuentas a los Presupuestos Generales del Estado que hace unos días presentaba el gobierno de Rajoy, donde se confiaba todo a la recuperación económica y evidenciaba una vez más que poco le importan las personas, con subidas de solo un 1,2% en Sanidad o un 0,7% en Servicios Públicos Básicos, por ejemplo’.
Frente a eso, Villalobos realza que, ‘en primer lugar, el realismo preside las cuentas andaluzas, con una previsión de crecimiento de la economía basada en las previsiones más pesimistas, en torno al 1,8%, y con incremento de partidas en el ámbito social, que es precisamente donde la presidenta dio su palabra de que se apostaría’.
Ahí, el regidor provincial ha destacado ‘las subidas del 1,9% y del 2% en Salud y Educación, respectivamente, la restitución del sueldo íntegro a los funcionarios de la Junta y la otra gran apuesta este año, que no es otra que la de la reactivación de la obra pública, con subidas del 20,4%’.
En relación con la transferencia de fondos a los Ayuntamientos, que se vuelve a fijar en 480 millones de euros, Villalobos ha comentado que ‘este apartado, aunque debiera ir creciendo, tampoco disminuye y se alinea con la congelación general de los presupuestos autonómicos para el próximo año -29.625 millones frente a los 29.623 de 2014-.
‘La Junta mantiene sus partidas y su compromiso con los Ayuntamientos mientras que otros solo buscan la manera de limitar cada día más la capacidad de maniobra financiera de los Ayuntamientos, ya sea a través del pago de intereses en los planes de ajuste o mediante la imposición de subidas de IBI a las entidades locales’, ha finalizado el presidente.