joaquin-ferrera-27-10-16

En la evolución de una relación de pareja, es normal que surjan conflictos de vez en cuando. Las causas que lo provocan suelen ser múltiples. Pero si queremos evitar que las broncas aparezcan por meros malentendidos al comunicarnos, tenemos que ir dejando de utilizar algunas expresiones y frases que pueden hacer saltar las tensiones solo con pronunciarlas.

Se habla mucho de que no nos comunicamos en pareja. Al respecto, cuando se le pregunta a una pareja suelen decir: “nosotros lo hablamos todo”, “los problemas solemos hablarlos”. Ya pero ¿cómo lo hablamos?. El problema no suele ser que no nos comuniquemos, sino que lo hacemos de forma inadecuada y poco operativa, para resolver conflictos.

Al respecto, os dejo a modo de guía algunas expresiones o frases que deberíamos dejar de lado o matizar, para que no salten chispas en la relación de pareja:

1. Frases que empiecen por ‘siempre’ o ‘nunca’

Al utilizarlas lo único que conseguimos es que la otra persona se ponga a la defensiva y no escuche lo que queríamos decirle. No es lo mismo decir “nunca vamos juntos al cine”, que “me gustaría algún día poderte acompañar al cine”.

2. ¿Desde cuándo te gusta…?

Aunque el ser humano suele ser de costumbres, el desarrollo de un nuevo interés o afición, no tiene que ser una amenaza para nuestra relación. Mas al contrario, negarse a aceptarlo o tratar de evitar que él o ella desarrollen esta faceta sí lo es.

3. ¡Estás exagerando!

Esta expresión, u otras análogas del tipo: “estás sacando los pies del plato”, “no te pongas a la defensiva” o el “haz el favor de calmarte” no son nada positivas. Si reprimes los sentimientos de tu pareja, aunque bajo nuestro punto de vista no esté en lo cierto, sólo hará que pongamos a nuestra pareja a la defensiva.

4. Perdona, ¿qué me decías?

Si finges que escuchas cuando no te estás enterando de nada, es peligroso en una relación de pareja. Tu pareja pensará que no te interesa lo que te cuenta y difícilmente lo volverá a hacer; por tanto se cierra la puerta comunicativa.

5. Los “te lo dije”

Debemos controlar ese tipo de expresiones. No lo sabemos todo. Hay que procurar no acusar a nuestra pareja de haber fracasado en algo aunque se lo hubiésemos sugerido previamente que podía no salirle bien.

6. Esta noche no me apetece

No debe ser una excusa sistemática. Explicar el motivo de por qué esa noche no, y no negarse sin más a tener relaciones sexuales, suele ser más constructivo para solucionar un desacuerdo.

7. ¿Pero cómo se te ocurre hacer…?

No acusemos. Nuestro objetivo debe ser apoyar a nuestra pareja, y animarla durante los tiempos difíciles, no hacerle sentirse mal.

8. No te creo

Es posible que haya momentos en los que creamos que nuestra pareja no nos está diciendo la verdad o está ocultándote algo. Pero esto no significa que estemos a la defensiva desde un primer momento. Podemos transmitir nuestra incredulidad pero de forma positiva.

9. Quiero separarme

Hacer esta manifestación en una discusión, diciéndole a nuestra pareja que la vamos a dejar, no cabe duda de que tiene una única lectura: ya hemos decidido dejar la relación y vamos a abandonar en cualquier momento.

10. “Si realmente me quisieras…”

Nuestra pareja no debe sentirse presionada a hacer algo que no quiera solo para demostrar su amor por nosotros. Realmente, debemos decir expresamente qué nos gustaría que hiciese nuestra pareja por nosotros, pero sin mensajes subliminales ni sobornos.

Si la comunicación en pareja no es adecuada, la pareja puede llevar a romperse o acabar en una terapia de pareja.

En definitiva, estos y otros aspectos de la comunicación, son lo suficientemente importantes en cualquier relación como para tenerlos en cuenta. Antes de comunicar, piensa, cuenta hasta diez (o más), y hazlo correctamente,….en positivo.

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