Para que media ciudad se divierta, se necesita el trabajo de mucha otra gente. Por otra parte, según datos aproximados, el impacto económico de la Feria de Abril está en torno a los 675,5 millones de euros, una cifra nada desdeñable en los tiempos que corren.
Existen pocos estudios detallados sobre la economía que mueve esta fiesta, en parte por la complejidad que supone el análisis de la economía sumergida, aunque desde la Universidad de Sevilla, profesores como Luís Palma están realizando trabajos en este sentido.
Pero en un ámbito más pragmático, no es complicado saber cuánto empleo se genera. Simplemente hay que observar como la empresa municipal de transportes, TUSSAM, ha incrementado su plantilla en 73 trabajadores para la feria.
Un vistazo por los portales de búsqueda de empleo las semanas antes de la feria, nos orientaban hacia los perfiles más demandados: camareros, cocineros y porteros o controladores de seguridad y acceso. Y esa es sólo la punta del iceberg pues aún se mantienen las familias de feriantes que movilizan en este tipo de actividad gran cantidad de mano de obra.
A esto hemos de sumar cocheros, personal de montaje de casetas, personal responsable de las atracciones de la calle del infierno, etc.
Otra cuestión es el trabajo dependiente del propio ayuntamiento, el cual dedica más de 400 efectivos municipales al Real, sobre todo para cuestiones de montaje y mantenimiento del recinto ferial.
Un caso llamativo es el de las personas que trabajan en el punto de información que se sitúa junto a la Portada. Con un horario de 12:00 a 22:00, con 30 minutos de descanso, compartiendo el habitáculo de la casetilla de información unas cinco o seis personas, sin ningún tipo de asiento, y de propina, el uniforme de las mujeres obligatoriamente era con tacones…
Artistas: otra cara del trabajo ferial
‘Los Amigos del Vaso’ es un grupo sanluqueño que desde hace ya muchos años viene a trabajar a la Feria de Abril.
Con rumbas y sevillanas, algunas de creación propia que más de un año han dado que hablar, animan y ambientan las casetas en las que actúan durante esta semana. Sus integrantes tienen otras profesiones, pero el extra que supone trabajar en la Feria de Abril, más aún con los tiempos que corren, es algo a lo que no se puede renunciar.
Juan Garrido es otro perfil de persona que trabaja en la Feria de Abril, aunque tal vez algo diferente. Jerezano, bailaor, familia de la Paquera, periodista de profesión, muy dedicado a la temática del flamenco y promotor del portal http://www.jerezjondo.com/
Ha trabajado un par de días en esta feria, bailando con un grupo también de Jerez y con Aurora Vargas y Pansequito la noche del ‘Alumbrao’. Se trata de casetas pequeñas, que buscan un flamenco alejado de los grupitos de rumbas y sevillanas.
Juan afirma que le viene muy bien trabajar en la feria; el baile es algo que le gusta y la remuneración no es mala, aunque por otro lado no quiere dedicarse por entero a esto. Afirma rotundo que su profesión es el periodismo, es por lo que trabaja día a día y además, su condición de crítico flamenco es algo incompatible con una dedicación plena al baile.