El notable rendimiento del futbolista uruguayo en estos cuatro encuentros superada ya su lesión, ha provocado que la pareja formada con el polaco Grzegorz Krychowiak se asiente en el esquema de Emery y dé ya sus frutos.
El centrocampista del Sevilla FC, Sebastián Cristóforo, está volviendo a renacer como futbolista de primer nivel, y el conjunto sevillista ya ha notado la circunstancia. La inoportuna lesión-rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda- que sufrió el 16 de marzo de 2014 en un encuentro del cuadro de Nervión ante el Real Valladolid, por la que estaría apartado de los terrenos de juego durante más de seis meses, y una posterior recaída en enero de 2015, de la que volvería ocho meses más tarde, habían hecho prácticamente cenizas toda ilusión del uruguayo de triunfar en el mundo futbolístico.
No es fácil, cuando apenas uno llega con menos de 20 años a Europa, no con otro fin que el de comerse el panorama futbolístico, y sabiendo que esos primeros años de experiencia a nivel profesional marcarán de sobremanera el devenir de un futbolista, conocer que habrás de ser intervenido quirúrgicamente de probablemente una de las lesiones más graves en el mundo de fútbol.
De hecho, el propio jugador charrúa reconoció que tras conocer la noticia de que habría de ser operado, lloró desconsoladamente y se hubo de refugiar en el cariño de su hermano y su madre: «Hubo lágrimas cuando me dijeron que tenía que operarme, volví a casa destruido. Hay gente que logra poder jugar sin operarse, pero me advirtieron que era joven y que me recomendaban intervenirme. Llegué a mi casa solo, llamé a mi hermano y a mi madre. Son momentos de soledad sabiendo que te falta mucho tiempo para recuperarte».
Pero una vez dejado aquel oscuro pasado, el futbolista natural de Montevideo está siendo testigo de cómo la vida te devuelve lo que en un futuro te quitó. Y es que el excelso encuentro que disputara en Copa ante la UD Logroñés, hizo que el técnico sevillista, Unai Emery, lo tomará como sustituto del mediocentro polaco, Grzegorz Krychowiak, en el choque disputara el cuadro nervionense ante el RCD Espanyol(2-0). Un duelo, en el que el más que notable rendimiento del joven centrocampista sería uno uno de los principales valedores de la victoria final de los hispalenses, y que podría abrirle las puertas de la titularidad en futuros encuentros.
Y así ha sido. Cristóforo ha vuelto a ocupar el eje de la medular, esta vez acompañado del centro polaco, en los cuatro encuentros restantes que ha disputado el Sevilla FC desde la fecha -dos en liga y dos en Copa-, asentándose dicha pareja en el centro del campo del esquema sevillista, y siendo pieza clave en sendas cuatro victorias.