El equipo de bádminton de La Rinconada venció ayer por 7-0 al conjunto valenciano, en la cuarta jornada de la División de Honor. El equipo rival tuvo que desechar un partido por falta de jugadores. Con este resultado, el Sodernisa pasa a la segunda fase.
Sevilla Actualidad. El Soderinsa Rinconada reforzó su condición de líder de su grupo con una victoria cómoda ante el Club Bádminton Alicante, que se presentó en el Fernando Martín con sólo dos jugadoras, lo que le obligó a tirar de antemano uno de los duelos individuales femeninos.
Ello, unido a la diferencia de calidad entre ambas escuadras, provocó que se resolviera el choque por la vía rápida, sin dar opciones a los alicantinos, que sólo demostraron ganas de agradar a sus paisanos en la figura de Alejandro Barriga, que regresaba a la que fue su casa con la camiseta visitante.
En el primer envite, el dobles mixtos, Carlos Longo y Laura Molina se deshicieron sin demasiados apuros de Laura Álvarez y Alejandro Barriga por 21-11 y 21-15. Fue el encuentro en el que más opciones tuvieron los valencianos, lo que da una idea de la diferencia de nivel entre ambas escuadras.
A partir de ahí, los partidos se sucedieron de forma rápida y clara para el Soderinsa, que usó a sus rivales como sparrings y demostró que, hoy por hoy, al margen de los fichajes que otros clubes puedan acometer, no tienen rival en el panorama nacional.
Los dobles masculinos y femeninos dejaron encarrilado el triunfo local con resultados abusivos para los pupilos de Antonio Molina. Bin Xin y Lianne Tan, que jugaron al 30 por ciento, aplastaron a Laura Álvarez e Irene Román por 21-6 y 21-5.
La pareja masculina tuvo más oposición en sus adversarios. Alberto Martínez y Alejandro Ferrer se dejaron la piel, pero eso no era suficiente ante la clase y la maestría de Carlos Longo y Ernesto Velázquez, que les ganaron el primer set por 21-13. En el segundo, a los visitantes les fallaron las fuerzas y el resultado fue aún más abultado: 21-8.
Con la disputa de los duelos individuales, la mente de los rinconeros estaba puesta ya en el próximo compromiso. Laura Molina ganó sin despeinarse a Irene Román por 21-11 y retirada, cuando la canterana rinconera vencía 2-1, mientras que Stenny Kusuma dio buena cuenta de Sergio Berenguer por 21-7 y 21-7.
En la última tanda de individuales, con 6-0 en el marcador, dado que el segundo individual femenino se decantó para el Soderinsa por incomparecencia alicantina, Ernesto Velázquez saltó a la pista con un extramotivado Alejandro Barriga.
Sobre el papel, era el duelo más igualado de cuantos se habían disputado en el Fernando Martín. En el primer set, la igualdad fue la tónica dominante hasta el 11-10, tras el que Barriga sufrió una pájara que permitió a Ernesto Velázquez despegarse en el marcador para adjudicarse la manga por 21-11. En el segundo juego la ventaja siempre fue para el roteño que se acabó llevando el set y el partido por 21-11.