La consejera andaluza de Salud admite que las posibles sanciones contra las empresas que han podido cometer un fraude en el etiquetado del aceite tardarán «no menos de cinco a seis meses».
Sevilla Actualidad. Montero ha explicado que una vez que se procedió a inmovilizar de forma cautelar los 24 lotes de este producto ahora se abre «el expediente correspondiente a cada uno de esos lotes», comunicándole a cada empresa responsable de esas marcas inmovilizadas «que aporte todos los datos relativos a su expediente» y de si quiere o no acogerse a contraanálisis.
«Todo este proceso tarda no menos de cinco a seis meses, ya que los análisis de laboratorio son lentos, salvo que una empresa admita de modo propio su conformidad con los primeros análisis que hicimos, no nos pida contraanálisis y sólo espere a la propuesta de la sanción correspondiente», ha aclarado.
Así, ha recordado que las empresa «tienen su período alegaciones y de pedir nuevos análisis», motivo por el que la Dirección General de Consumo, que está adscrita a la Consejería de Salud, procedió a la inmovilización preventiva de 24 lotes, «tras indicar nuestros resultados que se había producido un fraude en el etiquetado».
De hecho, a partir de la orden de inmovilización cautelar se procedió a abrir un procedimiento administrativo sancionador en el que si la empresa no acepta los resultados puede solicitar un análisis contradictorio. Si el resultado de los dos no coincidiese, un laboratorio realizaría un tercero con carácter urgente que sería el definitivo para determinar la categoría del aceite analizado.