El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha anunciado que Andalucía pone a disposición del Gobierno de España 1209 plazas para albergar refugiados.

De estas, 261 corresponden a instalaciones del Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera (IFAPA) y 220 a albergues de Inturjoven. A su vez, 160 pertenecen a otros albergues, 126 al Hospital Universitario Doctor Sagaz (Jaén) y 120 a otras instalaciones de la Junta de Andalucía. En total, 887 plazas en Andalucía, a las que hay que sumar 300 plazas en una residencia de Málaga cedidas por un particular y 22 ofrecidas por la Diputación de Málaga. «Y seguimos buscando plazas públicas y privadas en residencias, albergues y viviendas tuteladas por la Junta de Andalucía», ha dicho.

Moreno ha condenado, en nombre de su Gobierno, la invasión «absolutamente brutal» que está llevando a cabo la Federación Rusa contra un Estado democrático y constitucional, como es Ucrania. Asimismo, ha agradecido la marea de solidaridad que se ha desatado en la sociedad para ayudar a los refugiados ucranianos, «que sin duda es digna de elogio».

En este sentido, ha considerado imprescindible que el Gobierno de España lidere y coordine esta ola de solidaridad. Ha insistido en que el Estado cuenta con la máxima colaboración y lealtad de Andalucía. Además, ha informado que se han puesto a disposición del Gobierno de la Nación y del Consulado de Ucrania en Málaga recursos sanitarios, humanos y materiales.

Del mismo modo, se ha mostrado confiado en que durante la próxima Conferencia de Presidentes salga un Plan de Estado para coordinar a todas las comunidades autónomas en la acogida de refugiados. Confía en que el Gobierno de España habilite un Fondo Extraordinario de Solidaridad con Ucrania para atender a todas estas personas y cubrir todas sus necesidades básicas, desde la manutención a la educación o la asistencia sanitaria.

En Andalucía, desde el portal web juntadeandalucia.es se ha publicado una serie de recomendaciones para todos los ciudadanos que quieran ayudar. Así, se les aconseja canalizar cualquier tipo de ayuda a través de las ONG que trabajan sobre el terreno, como Cáritas, Cruz Roja, Médicos del Mundo o UNICEF.