Ni Francisco Javier Guerrero ni Antonio Rivas han respondido a las preguntas de los grupos parlamentarios, siguiendo la pauta iniciada este martes por los primeros comparecientes. Por su parte el ex alcalde de Cazalla de la Sierra, Ángel de la Borbolla, no ha acudido a primera hora, al no haber sido localizado.
La segunda sesión de comparecencias en la comisión de investigación parlamentaria de los presuntos ERE irregulares ha repetido el mismo esquema que su previa: monólogos de los comparecientes, preguntas orales sin respuestas de PP e IU y cuestionarios en papel entregados por el PSOE, que sí realizó tres preguntas orales de escaso interés al que fuese director general de Empleo.
Este miércoles ha sido el turno de Francisco Javier Guerrero, ex director general de Trabajo y Seguridad Social, que permanece en prisión desde el 10 de marzo imputado por la juez Alaya por sendos delitos continuados de prevaricación, malversación de caudales públicos y cohecho, así como por dos delitos de falsedad en documento oficial y falsedad en documento mercantil.
Así, y abandonando de forma puntual Sevilla I, Guerrero ha insistido en que “absolutamente nadie” en diez años “me dijo que realizara mis funciones de forma distinta a la que me instruyeron y que nadie cambió cuando me fui». Amparándose en su derecho a no responder, no ha contestado a las preguntas de los grupos parlamentarios. «Mis circunstancias y mi futuro, a corto y medio plazo dependen de un juzgado y en estas circunstancias, mi inocencia debe ser probada y no solo presumida», ha intentado justificarse.
De esta forma, incluso ha animado a PSOE, PP e IU a que trasladen sus cuestiones «a los gobiernos de la Junta en los periodos en los que se he sido director general, a los servicios jurídicos de la Junta, a la Intervención General, a los representantes de los sindicatos y de las organizaciones empresariales y a los partidos en esta Cámara».
«Todos han tenido conocimiento mediante la aprobación presupuestaria en el Parlamento, mediante el control parlamentario o el Tribunal de Cuentas», ha afirmado.Con todo, el ex director general de Trabajo ha asegurado que «desde 1999, año en el que entré como director general de Trabajo, hasta abril de 2008 cuando cesé, todos y cada uno de ellos han tenido conocimiento de mi trabajo». Por eso, ha dicho, «muchos no imputados, pueden resolver sus dudas. Suerte con ello».
Aunque no respondió a las cuestiones de los diputados de IU, PP ni PSOE -que realizó tres tímidas cuestiones de forma oral por primera vez en lo que llevamos de comisión- Guerrero si puntualizó ante las preguntas surgidas a raíz de las declaraciones de su conductor en las que decía que se gastaron fondos públicos «en droga, prostitutas y copas» que «soy jovial, pero no he sido un putero, ni drogodependiente y me tomo las copas que me apetece, donde quiero, como una persona normal». Asimismo hizo hincapié en que «sé cuanto cuesta un paquete de Malboro y un Gin Tonic, y ya está».
Igualmente tras ser cuestionado por el PP sobre si malgastó dinero público, Guerrero ha contestado que «no sé si he gastado bien o mal el sueldo que he tenido durante nueve años como director general y durante veintitrés años anteriores como director de oficina del INEM, pero es lo único que he percibido y mi familia no se ha quejado nunca, con lo cual, seguramente, no lo he malgastado».
Rivas dice que su abogado lo pagará él
Previamente, y por la mañana, ha comparecido en la comisión parlamentaria el ex delegado de Empleo de la Junta en Sevilla, Antonio Rivas, que tampoco ha respondido a las preguntas de los tres grupos.
En el proceso judicial, Rivas está imputado por presuntas comisiones ilegales en Mercasevilla y en el caso de los ERE por avalar, presuntamente, la entrada de intrusos en algunos expedientes, como el caso de Calderinox. «Ni concedía ni denegaba, ni discriminaba en razón de amistad o familia», ha insistido esta mañana al tiempo que afirmaba su inocencia.
De esta forma, Rivas ha dicho que los expedientes fueron «avalados por todos los intervinientes» y, quizá por eso, ha mantenido que sus palabras podrían aportar más bien “poca luz al no tener conocimiento de ilegalidad alguna”.
Durante el turno de preguntas del PP, Rivas interrumpió al portavoz popular del momento, Rafael Carmona, para aclara que «en los ERE no había nombres de intrusos» recordándole a este que los denominados intrusos aparecen en las pólizas de las compañías aseguradoras pagadas, eso sí, por la Junta. Las preguntas de Carmona, sobre una posible financiación irregular del PSOE de Camas -donde Rivas fue alcalde- provocaron la petición de la portavoz socialista en la comisión, Antonia Moro, al presidente de la misma, Ignacio García de «evitar que se convierta en un atentado contra instituciones y partidos políticos». Igualmente cuestionado por el PP sobre «si pagará a su abogado él, la Junta o el PSOE», Rivas dijo que «a mi abogado, cuando le pague, lo haré yo».
Por su parte la primera de las comparecencias previstas para hoy, la del ex alcalde de Cazalla de la Sierra, y hermano del ex presidente de la Junta, Ángel Rodríguez de la Borbolla, no se produjo ya que según Ignacio Díaz, no ha sido posible comunicarle la citación en tiempo y forma».