El PA pide dimisiones por “mala gestión del centro”, que cuesta mantener, aún cerrado, 1.500 euros al mes.
“Lo que está ocurriendo con el Centro de Emergencias de Alcalá de Guadaíra es el colmo de la ineficacia, pagar limpieza y el mantenimiento de un ascensor que nadie usa. Es para que el responsable coja sus cosas y se vaya”.
Así de contundente se ha expresado hoy la portavoz del Grupo Municipal Andalucista en el Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra, Lola Aquino, tras conocer la última factura presentada por la empresa de mantenimiento del Centro de Emergencias, y que alcanza un valor de 1.364,20 euros, correspondiente a los meses de octubre, noviembre y diciembre. Por otro lado la limpieza del edificio cuesta 1.022,75 euros al mes y ya llevamos dos meses de contrato: octubre y noviembre.
Para la líder andalucista, “es inconcebible que el Centro de Emergencias todavía no esté abierto y en funcionamiento después de habernos gastado los más de tres millones de euros que costó su construcción, y esto sin sumarle los gastos de dirección de obras, modificaciones de proyectos, mobiliario, equipamiento, y un largo etcétera”.
Según Aquino, el Centro de Emergencias está teóricamente terminado y cuenta con dotación de equipamiento y mobiliario, sistemas de telecomunicaciones y megafonía, es decir, no le falta nada, “salvo que se decida poner en marcha”. El agravante para los andalucistas alcalareños “es que todavía se pretenden acometer obras de mejora de la seguridad en la torre de prácticas (34.515,38 euros), el cerramiento del aparcamiento para los camiones (34.534,14 euros) y mejoras en seguridad vial en el entorno (22.450,15), pero seguimos sin noticias de su puesta en funcionamiento”.
El problema estriba para el PA “en que estas obras responden a defectos encontrados tanto por los bomberos como por la oficina técnica de tráfico, de forma que no entendemos cómo no se solventaron las deficiencias en la fase de proyecto, lo que evidencia una gestión política más que discutible y responde al egocentrismo del gobierno local, que piensa que todo lo hace a la perfección sin oír al resto”.
Para Aquino, “que se hable de que la torre de prácticas carece de medidas mínimas de seguridad o de la necesidad de disponer de una señalización que garantice la seguridad vial en la zona, son cuestiones de diseño que debieran haber estado previstas en la fase de proyecto, porque tanto los viales, el tráfico y las condiciones climatológicas ya estaban ahí. Si en vez del hermetismo y la falta de comunicación a la que nos tiene acostumbrados Limones, hubiese hecho partícipe a los implicados en materia de emergencias, seguramente no tendríamos que estar ahora tres años después de su licitación, gastando en mejoras que en realidad son cuestiones indispensables para permitir la apertura de dicho equipamiento, pero que ningún responsable político del gobierno de Limones, desde el año 2009 hasta la actualidad, ha visto o alertado”.
Para la portavoz del PA, “tras esta historia llena de despropósitos, esperamos que algún político del gobierno local se haga responsable del proyecto, o en su defecto, el propio alcalde, por no haber coordinado sus delegaciones con la diligencia que se presupone a una buena gestión política, que en este caso salta a la vista que no ha existido”.
Los andalucistas han abogado por que “éste sea el último capítulo de despropósitos respecto a este proyecto municipal y que las obras concluyan y podamos ver abierto a pleno rendimiento el Centro de Emergencias, donde Bomberos, Cruz Roja y Protección Civil, puedan trabajar en las mejores condiciones posibles”.