- A prisión el conductor del camión del atropello mortal en Los Palacios
- Seis muertos tras arrollar un camión un control de la Guardia Civil en Los Palacios
Ya ha recibido el alta hospitalaria Alberto Peces, uno de los guardias civiles heridos graves en el atropello acontecido a mediados de marzo al arrollar un camión articulado un control de drogas que había instalado la Guardia Civil en el punto kilométrico 24 del sentido Sevilla de la autovía AP-4, en el término municipal de Los Palacios y Villafranca; un siniestro saldado sobre todo con la muerte de seis personas entre las que figuraban dos agentes.
Recordemos que además de las seis víctimas mortales, el accidente arrojó un saldo de cinco heridos, todos ellos miembros de la Guardia Civil. Dos de ellos sufrieron lesiones leves y se desplazaron a centros sanitarios por sus propios medios, mientras otros tres revestían más gravedad y fueron ingresados en centros hospitalarios.
Uno de ellos, el de mayor gravedad, sufría un neumotórax bilateral y otros traumatismos y fue ingresado en el hospital Virgen del Rocío; mientras otro más resultó afectado con una fractura en una pierna y un último herido habría sufrido una fractura de fémur y además lesiones en el páncreas y el hígado, siendo estos dos últimos atendidos en el hospital de Valme.
A finales de marzo trascendía que ya había recibido el alta hospitalaria uno de los dos agentes cuyas lesiones revestían menos gravedad, mientras el guardia civil afectado por neumotórax bilateral y otros traumatismos y el segundo de los agentes menos graves seguían hospitalizados con una «evolución favorable» de su estado de salud y sin riesgo para sus vidas en cualquier caso.
Ahora ha trascendido que ha recibido el alta hospitalaria Alberto que, previsiblemente, no podrá volver a caminar adecuadamente como consecuencia del tipo de lesión sufrida en la pierna.
El accidente ocurría sobre las 04:40 horas de la madrugada en el kilómetro 24 del sentido Sevilla de la autovía AP-4, en Los Palacios, donde el Grupo de Acción Rápida (GAR) de la Guardia Civil había instalado un control de interceptación de traslados de sustancias estupefacientes, conformado por un total de 17 agentes, el doble del mínimo de ocho efectivos que marca el protocolo del Instituto Armado para este tipo de dispositivos.
Aunque el control estaba en un punto «de visibilidad» de la autovía y estaba debidamente señalizado, según el subdelegado del Gobierno central en Sevilla, Francisco Toscano Rodero, fue «barrido» según sus palabras por un camión articulado cargado de productos hortifrutícolas que había partido de La Línea de la Concepción (Cádiz) con destino a Guarromán (Jaén).
