Archivo - Vista general del Pantano de Aznalcóllar, en foto de archivo. - Rocío Ruz - Europa Press - Archivo

Las últimas lluvias que ha traído la borrasca Mónica a Sevilla han provocado el retraso hasta después de verano de las posibles restricciones de agua. Las precipitaciones que desde el pasado jueves se han producido en buena parte de Andalucía han «aliviado mucho» la toma de decisiones prevista por Emasesa en cuanto a la reducción de la presión del agua en los domicilios sevillanos.

El delegado de Urbanismo, Juan de la Rosa, ha explicado que «estaba previsto que se hiciese en primavera, pero se descartó hasta el verano y, posiblemente, estas lluvias retrasen esa toma de medidas. Sin embargo, la empresa tiene que estar preparada porque hay que garantizar la calidad y la cantidad del agua a los ciudadanos».

Los embalses que abastecen a Sevilla, casi a la mitad de su capacidad

Los embalses de la cuenca del Guadalquivir han recibido unos 200 hectómetros cúbicos de agua con las últimas lluvias, según los datos de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG). Tras las últimas precipitaciones, los embalses que abastecen a Sevilla se encuentran, de media, en torno al 46,5% de su capacidad. Los pantanos de Melonares y Cala se hallan al 58 y 57%, respectivamente; el del Gergal al 81% y el de Zufre ronda el 25%.

«El consejo de administración ha tenido muy presente que esas medidas estaban siendo trabajadas por si había que tomar la decisión de ponerlas en marcha y que, siempre, esa puesta en marcha estaría en función de las lluvias o no», ha añadido De la Rosa.