Cinco dotaciones de bomberos, en colaboración con la Policía de Sevilla y la Protección Civil, trabajaron para extinguir un incendio de vegetación en el Parque del Alamillo. A pesar de la rápida propagación de las llamas debido a las condiciones climáticas adversas, el incendio fue controlado y actualmente se encuentra en fase de enfriamiento.

El incidente, que se originó en la vegetación cercana al camino que bordea la dársena del Guadalquivir, fue enfrentado por los equipos de emergencia presentes en el lugar. La acción conjunta y coordinada de los bomberos, la policía y la Protección Civil permitió evitar que las llamas se expandieran aún más y causaran daños mayores en el entorno natural.

Las circunstancias meteorológicas, con ráfagas de viento de componente suroeste, complicaron la tarea de los bomberos al impulsar el avance del frente de llamas por la parte baja de los eucaliptos. A lo largo de aproximadamente 180 metros, la maleza ardía con intensidad, generando una escena impresionante pero peligrosa.

Los bomberos lograron cortar el avance de las llamas, evitando que se propagaran aún más. Una vez controlada la situación, se concentraron en enfriar minuciosamente los tocones de los árboles que habían sido cortados. Este paso es crucial para prevenir cualquier posible reinicio del incendio, ya que los tocones incandescentes pueden convertirse en focos de calor nuevamente. Afortunadamente, no se reportaron personas afectadas por el incendio, y la operación de respuesta al siniestro no interrumpió significativamente el tráfico en la zona.