El Ayuntamiento de Sevilla, a través de la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente en coordinación con el Distrito Triana, ha iniciado obras de mejora de la calle Ruiseñor. “Se trata de un proyecto que va a reforzar la seguridad de los peatones en una calle que tenía tramos donde no existía el acerado y los vecinos salían del portal de su casa directamente a la calzada. Respondemos a las demandas de los residentes por favorecer el tránsito de personas, sobre todo de las mayores o de las que tienen diversidad funcional, con un nuevo diseño que incluye adoquín tradicional para uniformar la estética y que gana plazas de aparcamiento, pero sobre todo, que ofrece más seguridad y accesibilidad”, ha destacado la delegada del distrito, María Encarnación Aguilar, en su visita a unas obras que se van a mantener hasta otoño. En esta visita ha estado acompañado por el gerente de Urbanismo, Juan Carlos de León.

Esta actuación, que cuenta con un presupuesto de 70.589,42 euros con cargo al contrato de conservación del viario público de la Gerencia, contempla la ampliación de acerados, que se adaptan a los anchos mínimos que exige la normativa de accesibilidad universal, hasta los 1,8 metros de amplitud. Los nuevos acerados se conforman a partir de solerías similares a las del entorno con superficies podotáctiles en las proximidades de los pasos de peatones y conforman plataformas elevadas que facilitan el paso de personas con diversidad funcional eliminando las barreras arquitectónicas. También se amplían los orejetes en las intersecciones con las vías Justino Matute, Jacinto Martos o Leiria y se amplía el acceso a los bloques pares desde el 12 en adelante que antes no tenían acceso claro o que, directamente, no tenían acerado, por lo que los residentes salían directamente a la calzada con el consecuente peligro.

Para este nuevo diseño se ha rediseñado la calzada, que se reduce minimizando la velocidad de paso de los vehículos a la que marca la normativa de 20 kilómetros por hora para vías de un solo sentido de circulación. Pasará a estar completamente confeccionada por adoquín tradicional hasta los accesos a los garajes privados o las antiguas plazas de aparcamiento realizadas en losas de hormigón que se sustituyen por estas piezas. La redimensión de la vía permite además la inclusión de tres nuevas plazas de aparcamiento en los números impares. También se han ampliado los alcorques de los árboles existentes, que se han protegido durante el desarrollo de los trabajos.

Las obras de la calle Ruiseñor de Triana suponen una inversión de 70.589,42 euros que se planifican desde el contrato de conservación y mantenimiento de la vía pública de la Gerencia de Urbanismo, que cuenta con un presupuesto de 30 millones de euros para los próximos tres años y que solo en 2022 proyectaba más de 1.300 actuaciones en la vía pública relacionada con la mejora de las pavimentaciones, intervenciones más amplias y de mejor calidad y reducción de los tiempos de ejecución. Esta ampliación supone un crecimiento del 150 por cien con respecto al contrato precedente.