El proyecto contempla crear una plaza abierta frente al templo y reordenará el tráfico en la zona, además de señalizarla correctamente para las personas con movilidad reducida.
El Ayuntamiento de Sevilla reurbanizará el entorno de la basílica de la Macarena para hacerlo peatonal, para ello creará una plaza en el espacio delantero del empleo eliminando así el tráfico. La licitación esta prevista para mayo y las obras comenzarán tras el verano y durarán seis meses. Estas obras cuentan con una inversión de 423.000 euros. «Se trata de crear un entorno mucho más amable y noble que realce ambos elementos».
El primer objetivo es eliminar el intenso tráfico y la presencia de vehículos estacionados. Todo el espacio peatonal estará dotado con la señalización conforme a la normativa para personas de visibilidad y movilidad reducida. En segundo lugar, se dotará a la zona de un «pavimento digno» para crear una especie de plaza que recuerde al trazado de la muralla que se ha ido perdiendo en los últimos años.
Otros de los cambios que se van a realizar es desplazar la parada de taxis existente hacia la Resolana, por detrás del carril bici, así se creará un espacio peatonal. Para evocar al antiguo Camino de Ronda, actualmente la calle Bécquer, se remarcará en el pavimento el trazado en planta de la muralla.
Además, en la zona aledaña a la rampa de salida del arco y en el extremo de la parada de taxis, se crearán unos parterres con arbustos de poco crecimiento. También se eliminará la entrada de tráfico desde la calle Bécquer a San Luis, manteniendo únicamente el paso esporádico desde la calle Macarena por debajo del Arco hacia Doctor Fedriani y la calle Parlamento de Andalucía.
La Hermandad de la Macarena también acometerá en los próximos meses unas obras en el atrio de entrada a la basílica, dotándolo de una nueva solería y una reja acorde con el espacio que contribuirán también a mejorar la percepción del nuevo espacio peatonal.