nazarenos la paz

Es aconsejable, en paradas prolongadas cambiar la posición de los pies y realizar pequeños movimientos en círculo con cada pie.

La Semana Santa es una celebración que no sólo la viven los que participan dentro de las hermandades, sino que muchas personas participan en ella viendo procesionar sus imágenes preferidas. Para algunos, asistir a procesiones interminables se convierte en un verdadero calvario para sus pies. Para intentar evitar los problemas con los pies un estudio de la podóloga Beatriz Hernáez ofrece una serie de consejos.

En primer lugar, visitar al podólogo para revisar nuestros pies y mantener un corte adecuado de uñas y la piel hidratada. Es recomendable, lavar los pies evitando baños prolongados y secar el espacio entre los dedos.

Comprar un calzado adecuado es clave. El calzado de caballero debe tener suela flexible, gruesa, transpirable y sujeto al empeine y el de señora debe ser flexible, transpirable, de base ancha. Evitar puntera estrecha y tacón no superior a 4 centímetros.

En paradas prolongadas es aconsejable cambiar la posición de los pies y realizar pequeños movimientos en círculo con cada pie y cuando volvamos de las procesiones, y para aliviar los pies hinchados, realizar baños de contraste empezando por agua tibia y finalizando con fría. Posteriormente mantenemos los pies elevados.