Según la sección sindical de CCOO en este centro hospitalario, este colectivo está formado mayoritariamente por mujeres, jóvenes y con unos salarios en torno a los 800 euros mensuales.
La sección sindical de CCOO en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla denuncia que «las trabajadoras y los trabajadores eventuales de este hospital se ven obligados a realizar jornadas de trabajo que sobrepasan los límites legales de forma sistemática y planificada, un exceso de horas que no se les paga».
Los trabajadores eventuales del Hospital Virgen del Rocío «sufren una doble explotación por parte del Servicio Andaluz de Salud (SAS)», según la versión del sindicato, por un lado, «ven disminuido su salario en un 25% y, por otro lado, les incrementan su jornada en un 5%».
Según la sección sindical de CCOO del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, son contratos precarios, la mayoría estacionales, con lo que solo trabajan en verano y sin posibilidad, por tanto, de poder regularizar su situación con un hipotético ajuste de horas en otro periodo de contrato. Otra particularidad del colectivo afectado, explica la sección sindical, es que se trata mayoritariamente de mujeres, jóvenes y con unos salarios en torno a los 800 euros mensuales. “Con estos datos reales y constatables no nos queda más remedio que pensar que la Consejería de Igualdad, Salud y Bienestar Social desconoce cómo el SAS maltrata y explota a sus mujeres trabajadoras”, afirman desde la sección sindical.
Tras reuniones mantenidas por esta sección sindical con la Dirección del Hospital, la Subdirección de personal “se muestra inflexible en sus posicionamientos para defender su particular forma de aplicación de la jornada laboral para sus trabajadoras y trabajadores eventuales, siguiendo, dicen, instrucciones del SAS. Argumentos que no nos pueden convencer en tanto en cuanto se está vulnerando, a sabiendas, la normativa de retribuciones y de jornada laboral del propio SAS, y es por ello que entendemos que la actuación de la Dirección del Hospital Virgen del Rocío en este sentido está muy cerca de lo que podría constituir una prevaricación”.
“Con unos recursos humanos escasos, mal pagados y a los que se explota más allá de la legalidad es con los que el SAS intenta prestar una asistencia sanitaria de calidad a la población andaluza, y de ahí sus resultados, con el aumento en las listas de espera y con una clara disminución en la satisfacción de los usuarios con la sanidad pública”, entienden desde la sección sindical.