España se convierte en el quinto país del mundo con una Ley de Eutanasia. El Congreso de los Diputados la aprobaba en la sesión de este jueves con 202 votos a favor, 101 en contra y dos abstenciones.

Para poder solicitarla, los pacientes deberán sufrir una enfermedad grave e incurable o un padecimiento grave, crónico e imposibilitante” que le cause un “sufrimiento intolerable”. Para que sea efectiva, el paciente recibirá la ”administración directa de una sustancia por parte del profesional sanitario competente”. Además, se concreta que ”la prescripción o suministro al paciente por parte del profesional sanitario de una sustancia, de manera que este se la pueda auto administrar, para causar su propia muerte”.

El Pleno ha debatido la incorporación o no de las enmiendas introducidas por el Senado a la Proposición de Ley Orgánica de regulación de la eutanasia. Se han aprobado con 198 votos a favor, 142 en contra y 2 abstenciones. Y, finalmente, la iniciativa ha alcanzado la mayoría absoluta en una votación final de conjunto. Requerida por ser una proposición de ley orgánica, con 202 votos a favor, 141 en contra y 2 abstenciones
 
Esta iniciativa, impulsada por el Grupo Socialista, introduce en el ordenamiento jurídico español la eutanasia como un nuevo derecho individual. Entendida como «la actuación que produce la muerte de una persona de forma directa e intencionada mediante una relación causa-efecto única e inmediata, a petición informada, expresa y reiterada en el tiempo por dicha persona. Y que se lleva a cabo en un contexto de sufrimiento debido a una enfermedad o padecimiento incurable. La persona lo experimenta como inaceptable y que no ha podido ser mitigado por otros medios».