Hospital Virgen Macarena.

Seguir luchando por vencer al cáncer durante la pandemia requiere un dispositivo especial: el Hospital Macarena ha asistido a sus pacientes oncológicos según un Plan de Contingencia que se elaboró al comienzo de la crisis sanitaria, teniendo muy presente el riesgo de contagio del COVID-19.

El Hospital Universitario Virgen Macarena, a través de Luis de la Cruz Merino, Jefe del Servicio de Oncología Médica y en relación a las noticias surgidas en diferentes medios de comunicación, relativas a la supuesta suspensión de tratamientos de quimioterapia en pacientes oncológicos, informa sobre la asistencia oncológica prestada durante este periodo de emergencia sanitaria.

En primer lugar, teniendo muy presente la situación epidemiológica por la pandemia global por COVID-19 y con objeto de minimizar el riesgo de contagio y complicaciones mayores de los pacientes oncológicos, se elaboró desde los primeros días de la crisis sanitaria un Plan de Contingencia Médica para la asistencia oncológica en los diferentes Servicios de Oncología Médica de Andalucía.

Ante el riesgo de complicaciones graves en los pacientes por la administración de tratamientos potencialmente inmunosupresores, en especial quimioterapia, se procedió a revisar cada una de las indicaciones terapéuticas de manera individualizada. De esta manera, se llevó a cabo una valoración exhaustiva de riesgo-beneficio, decidiéndose la continuación, retraso, modificación o suspensión de los tratamientos antineoplásicos siguiendo siempre criterios estrictamente clínicos y de beneficio para los pacientes. Este proceder se ha puesto en marcha en consonancia con lo realizado en el resto de Servicios y Unidades de Oncología Médica de Andalucía y del país, y de acuerdo a las recomendaciones emitidas por las diferentes sociedades científicas nacionales e internacionales (SEOM, ESMO, ASCO). En el caso concreto de Andalucía, las actuaciones han sido puestas en común a través de la red de responsables de Oncología Médica de Andalucía, coordinados por el Dr Enrique Aranda, Jefe de Servicio de Oncología Médica del Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba.

Con respecto a las consultas externas, los oncólogos del Hospital Universitario Virgen Macarena han valorado cada caso de manera individualizada para decidir si la atención debía realizarse presencial o telefónica. Se ha mantenido atención presencial para primeras visitas, tratamientos antineoplásicos, empeoramiento de la situación clínica o síntomas de difícil manejo y el resto de los casos ha sido atendido vía telemática (revisiones, recogida de resultados, prescripción/renovación de tratamientos orales/subcutáneos y validación para tratamientos de quimioterapia). Asimismo, en estrecha colaboración con Farmacia Hospitalaria, se ha potenciado el servicio de Telefarmacia, haciendo visita telefónica para comprobar idoneidad y, en su caso, enviar al domicilio de los pacientes la medicación antineoplásica con informe que especificaba la indicación de tratamiento (pauta posológica, dosis y vía de administración, así como fecha de siguiente cita con volante de analítica). De esta manera, se han evitado aproximadamente un mínimo de un 50% de desplazamientos innecesarios al hospital en esta situación de emergencia sanitaria. Este circuito de Telefarmacia implantado en HUVM fue remitido al resto de Servicios de Oncología Médica de Andalucía.

Teléfono de atención directa

Otras de las medidas dentro del Plan de Contingencia fue habilitar, en horario de 8.00 a 20.00 horas, un teléfono de atención directa a la ciudadanía atendido por  facultativos de Oncología Médica. Actualmente, pasada la fase más aguda de la emergencia sanitaria, este teléfono es atendido en primera instancia por las auxiliares de enfermería en horario de 9.00 a 14.00 horas. Además, se ha elaborado un documento de recomendaciones para pacientes oncológicos en la situación de alerta por COVID-19.

Además de todo lo anterior y para proteger al paciente oncológico dada su vulnerabilidad frente a la infección, el Hospital de Día ha trasladado su ubicación a un área más apropiada y segura del Hospital. En la sala de espera se respeta la distancia de seguridad, se entrega mascarilla quirúrgica-higiénica al paciente y se le facilita la higiene de manos y uso de solución hidroalcohólica. Asimismo, se ha reforzado con personal de enfermería para espaciar horarios y evitar aglomeraciones de pacientes tanto en salas de espera como en las salas de tratamientos.

En la hospitalización se han extremado las medidas de seguridad y protección de pacientes (con la entrega de mascarilla quirúrgica a pacientes y familiares), y a todos los pacientes hospitalizados se les ha realizado, previo al ingreso en la Unidad, la determinación de la PCR. Finalmente, es de destacar que en las ubicaciones compartidas de Oncología Médica y Oncología Radioterápica del Hospital Universitario Virgen Macarena se han realizado repetidas labores de desinfección tanto de zonas comunes como de zonas de tratamiento.

La asistencia oncológica de los pacientes en el área hospitalaria Virgen Macarena durante este periodo ha sido garantizada en tiempo y forma, teniendo siempre en cuenta los potenciales riesgos derivados de la situación epidemiológica y gracias a la máxima profesionalidad, esfuerzo y dedicación de todo su personal sanitario y no sanitario.

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