Guadalcanal.

Ubicado en plena Sierra Norte de Sevilla, Guadalcanal es el municipio que ostenta el título de ser el pueblo más alto de la provincia, con una altitud de 662 metros sobre el nivel del mar. Este pueblo, rodeado de montañas y naturaleza, se encuentra en el extremo norte de Sevilla, formando parte del Parque Natural de la Sierra Norte, una de las joyas ecológicas de Andalucía.

La historia de Guadalcanal está marcada por su origen romano y su desarrollo durante la época musulmana. Su nombre actual proviene de la combinación de dos palabras árabes, «Wadi-al-Qanat», que significa «río de los canales», en referencia a los arroyos que atraviesan la región. Con el tiempo, se ha convertido en un pueblo de gran riqueza patrimonial y cultural, conservando numerosos monumentos históricos como la Iglesia de Santa María de la Asunción y la Ermita del Cristo de las Aguas.

En 1241, fue conquistada por por Rodrigo Íñiguez, Maestre de la Orden de Santiago, quedando bajo su jurisdicción. En el siglo XV, fue escenario de una lucha entre Enrique de Guzmán, duque de Medina Sidonia, y Alfonso de Cárdenas por el control de la Orden. Tras su participación en la revuelta de los Comuneros, sus defensas fueron derribadas. En 1833, pasó de pertenecer a Extremadura a ser parte de la provincia de Sevilla. Durante la Guerra de Independencia, fue testigo de enfrentamientos entre los ejércitos anglo-español y francés, ocupada por ambos en diferentes momentos.

Además de su legado histórico, Guadalcanal es un destino ideal para los amantes del senderismo y el turismo rural. Sus alrededores ofrecen rutas por parajes naturales que destacan por la biodiversidad y belleza paisajística de la Sierra Norte. La fauna local, con especies como ciervos y jabalíes, y su vegetación típica de monte mediterráneo hacen del entorno un lugar perfecto para conectar con la naturaleza.