Los equipos ROCA de la Guardia Civil, aquellos dedicados a investigar los robos que se producen en el campo, en el ámbito agrícola y ganadero, han conseguido recuperar más de 26 toneladas de cítricos robados durante la campaña de recogida en localidades dedicadas a este tipo de labor. Desde el inicio de dicha campaña, intensifican el control del transporte de estas mercancías dedicadas al consumo humano mediante dispositivos de vigilancia en vías públicas y en centros de recepción y se unifican criterios de colaboración con agricultores, cooperativas agrícolas, policías locales y guardas rurales, creándose grupos de trabajo permanentes para tal fin.

Recientemente, el equipo de La Rinconada ha localizado 3000 kilos de naranjas de las variedades navelinas y navel en la localidad de La Algaba dispuestas ya en cajas para ser trasladadas en un camión. Hasta la fecha, durante la campaña cítrica han sido aprehendidas por este equipo un total 20.500 kilos de mandarinas y naranjas de diferentes variedades, muchas de la cuales se encontraban tratadas mediante productos fitosanitarios, no siendo aptas para su distribución y consumo. De esos 20.500, 13.000 fueron inmovilizados en Guillena conjuntamente por Inspectores de calidad de la Delegación Territorial de la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural.    

Por parte del de Sanlúcar La Mayor, fruto de estos contactos diarios con el sector agrícola, se ha podido actuar de forma inmediata sobre los autores en el momento en el que se encontraban cometiendo los robos, lográndose así evitar los mismos, habiéndose conseguido desde el mes de noviembre, detener e investigar a un total de 16 personas, esclarecer siete robos y hurtos, y recuperar más de 3000 kilogramos entre naranjas y mandarinas, habiéndose detectado con estas rápidas actuaciones la disminución en el número de sustracciones.

Del de Cazalla de la Sierra destaca la investigación a dos vecinos de Lora del Río tras interceptarlos con un remolque de caballos cargado con 2620 kilos de naranja a granel, no aportando documentación de su legal procedencia, procediendo a su aprehensión, y deposito en la Cooperativa San Sebastián de Lora del Río, donde posteriormente serían reconocidas por el responsable de la finca quien ya había constatado la sustracción y la presencia del remolque en ella.