El equipo de Gobierno considera que no es oportuno incrementar la presión fiscal a la economía de las familias maireneras.

El Ayuntamiento opta un año más por congelar el tramo municipal del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) que aplicará en 2016, considerando que no es oportuno incrementar el gravamen a la economía de las familias maireneras.

El tipo se mantiene en 0,6566. Por tanto, la presión fiscal no aumentará tras más de diez años consecutivos. Esta medida es factible en base a la determinación económica que ha mantenido el equipo de Gobierno en los últimos años que además, permite estimular otras partidas presupuestarias de gasto social.

Este impuesto grava los bienes inmuebles dentro del término municipal, y supone una fuente de ingresos fundamental en el proyecto económico del Consistorio. Concretamente, una tercera parte del presupuesto del Ayuntamiento y en torno al 25% del consolidado.

El delegado de Economía y Hacienda, Juan Manuel López, anuncia la racionalización del gasto conforme a los ingresos, lo que ha permitido que este año no haya subido ningún impuesto municipal.