Mientras uno de los detenidos agredió a la dueña tras entrar en el local con el rostro cubierto, el otro lo esperaba en un vehículo con el motor en marcha.
Componentes de la Guardia Civil de Villamanrique de la Condesa han detenido a dos personas como presuntos autores de un robo con violencia e intimidación. Los hechos investigados se remontan a finales de julio pasado. Una vecina de la localidad, propietaria de un supermercado, acudió a la Guardia Civil para denunciar que había sido víctima de un robo. Mientras se encontraba en su local, a última hora de la tarde, entró un individuo de 1,80 metros de altura aproximadamente, cuyo rostro ocultaba con la capucha de una sudadera gris.
Esta persona le exigió el dinero y la agredió, ocasionándole fractura de una pieza dental y diversos hematomas y contusiones en su cabeza y rostro. Todo esto sucedió en presencia de varios testigos. Posteriormente, el ladrón se llevó el cajón de la caja registradora y salió huyendo.
La Guardia Civil comienzó a investigar y se entrevistó con diferentes testigos, tanto los que presenciaron el hecho como otros que se encontraban en la calle, en las inmediaciones del lugar. De este modo se consigue saber las características del vehículo en el que huyeron los sospechosos.
Gracias a la colaboración ciudadana, los agentes comienzaron a dirigir sus sospechas hacia un vecino de Villamanrique que actuaría en connivencia con otro. Mientras uno de ellos entró en el supermercado y perpetró el robo, el otro permanecía alerta, esperándolo con el vehículo en marcha.
Finalmente la Guardia Civil consiguió identificar a estas dos personasal. Una de ellas es localizada y detenida tras ser reconocida por víctima y testigos. Se trata del vecino de Villamanrique. El otro implicado y propietario del vehículo es también identificado como vecino de Alcalá de Guadaíra y si bien en un principio no se consigue localizar, finalmente se entrega voluntariamente. Se da la circunstancia de que ambos se conocieron mientras cumplian condena por otros hechos delictivos. Ambos detenidos son puestos a disposición judicial, quien decreta su ingreso en prisión.