La localidad sevillana acoge un año más esta actividad, que se celebra por las calles del entorno a la Iglesia de San Miguel

Como en años anteriores la localidad de Morón de la Frontera acogerá este fin de semana la VI Edición del Mercado Medieval por las calles del entorno a la Iglesia de San Miguel. Este año la edición está dedicada al Circo del Medievo y al Mercado Medieval donde se podrán disfrutar actuaciones de malabaristas, músicos y bufones.

Sevilla Actualidad. Morón de la Frontera recibe este año la VI Edición del Mercado Medieval dedicado con especial interés al Circo del Medievo. Las calles del entorno a la Iglesia de San Miguel se llenan durante este fin de semana coincidiendo con el fin de octubre y el puente de los difuntos.  La Delegación de Turismo del Ayuntamiento de Morón ha apostado por la celebración del Mercado Medieval en otoño tras el éxito conseguido con el cambio de estación de primavera a otoño para la celebración de la edición anterior.

“En primavera se concentran un mayor número de fiestas en nuestra ciudad, por ello el año pasado decidimos que el Mercado Medieval se celebrara en octubre para darle mayor realce y ofrecer a los moronenses actividades durante todo el año”, ha afirmado el delegado de Turismo y Cultura, Francisco José Coronado.

El Mercado Medieval se ha ido consolidando desde 2004 cuando el gobierno de Manuel Morilla puso en marcha el proyecto para activar el turismo como un impulso económico  de Morón y así poder promocionar la ciudad.

El viernes por la tarde se procederá a la apertura del mercado y se podrá disfrutar de un paseo en burro, pasacalles, juegos infantiles, espectáculos del circo o tiro con arco, entre otras actividades. El sábado la apertura será por la mañana con espectáculos de músicos, malabaristas, bufones y juegos infantiles, entre otras más actividades de entretenimiento y disfrute que continuarán por la tarde y por la noche con espectáculos nocturnos. El domingo se volverán a repetir todas las actividades como el paseo en burro, el tiro con arco o los espectáculos de bufones para terminar con la ‘noche de fuego’.