En la actualidad, tener un coche propio se ha convertido en una necesidad para muchas personas que viven o trabajan en las ciudades. El coche ofrece comodidad, autonomía y rapidez para desplazarse de un lugar a otro, sin depender del transporte público o de terceros. Sin embargo, comprar un coche nuevo no es una opción viable para todos, debido a los altos costes que implica. Ante esta situación, el renting de coches se ha posicionado como una alternativa atractiva y ventajosa para quienes quieren disfrutar de un vehículo sin tener que adquirirlo en propiedad.

El renting consiste en alquilar un coche por un periodo determinado, pagando una cuota mensual fija que incluye todos los servicios y gastos asociados al mismo. De esta forma, se evita el desembolso inicial y el riesgo de depreciación del vehículo, así como los problemas de mantenimiento, reparación o impuestos.

¿Por qué cada vez más personas ven con buenos ojos el renting de coches por encima de la compra?

Podría decirse que en los tiempos que pasan las personas ya no se sienten atraídas por la compra de un coche nuevo como sí pudiera haber ocurrido en años anteriores. Las razones pudieran estar en la subida de precios de los coches, incluso de las gamas bajas; la imposibilidad de financiación para la mayoría de las familias o, desde luego, la imposibilidad de cumplir con los requisitos que muchas entidades bancarias o concesionarios exigen para ello.

Es en ese contexto donde surge la posibilidad, aunque también para las empresas y autónomos, del renting de coches. Una posibilidad a la que cada vez se mira con mejores ojos y por varias razones, como las que a continuación se citan:

  • Flexibilidad: el renting permite elegir el modelo, la marca y el equipamiento del coche que se desea, así como el tiempo y los kilómetros que se van a utilizar. Además, se puede cambiar de coche cada cierto tiempo, adaptándose a las necesidades y preferencias de cada momento. Salvo que se tenga mucho capital disponible para maniobrar, en el mercado de la compraventa sería imposible encontrar una solución igual de flexible.
  • Ahorro: el renting supone un ahorro económico frente a la compra, ya que se paga una cuota fija que incluye todos los servicios y gastos relacionados con el coche, como el seguro a todo riesgo, las revisiones, las averías, los neumáticos, la ITV y los impuestos. Así, se evitan sorpresas y se facilita la planificación financiera, puesto que cada mes o incluso cada año, se sabrá de antemano cuánto hay que pagar por utilizar el coche, salga del garaje 2 veces al mes, o salga 4 veces por día todos los días.
  • Tranquilidad: el renting ofrece tranquilidad y seguridad al conductor, ya que no tiene que preocuparse por el mantenimiento o la reparación del coche, ni por su venta o su valor residual. Además, cuenta con la asistencia y el respaldo de la empresa de renting, que se encarga de gestionar todo lo relacionado con el vehículo.
  • Sostenibilidad: el renting contribuye a la sostenibilidad ambiental, ya que favorece la renovación del parque automovilístico y el uso de coches más eficientes y ecológicos. Además, al reducir el número de coches en propiedad, se disminuye la congestión y la contaminación en las ciudades. Esto también tiene ventajas en cuanto a la posibilidad de circulación sin restricciones, algo que sólo se puede tener con coches modernos y de gamas medias y altas.

¿Cómo elegir el coche y la agencia adecuada al momento de alquilar un coche?

A la hora de alquilar un coche, es importante tener en cuenta una serie de aspectos que pueden influir en la satisfacción y el rendimiento del servicio. Algunos de ellos son:

  • El tipo de coche: se debe elegir el coche que mejor se adapte a las necesidades y al presupuesto de cada uno. Para ello, se debe considerar el uso que se le va a dar al vehículo (urbano, interurbano, familiar, profesional…), el tamaño, la potencia, el consumo, las prestaciones y el equipamiento.
  • La agencia de renting: se debe escoger una agencia de renting que ofrezca garantías de calidad, profesionalidad y transparencia. Para ello, se debe comparar las condiciones y los precios de las diferentes ofertas disponibles en el mercado, así como las opiniones y las experiencias de otros clientes. También se debe verificar que la agencia cumpla con los requisitos legales y fiscales exigidos para este tipo de servicio.
  • El contrato de renting: se debe leer detenidamente el contrato de renting antes de firmarlo, para asegurarse de entender todas las cláusulas y las obligaciones que implica. Entre otros aspectos, se debe prestar atención a la duración del contrato, la cuota mensual, los kilómetros contratados, las coberturas del seguro, las penalizaciones por incumplimiento o daños al vehículo y las opciones de renovación o cancelación.

Beneficios del renting de coches para particulares, autónomos y empresas

El renting de coches no solo es una opción interesante para los particulares que quieren disfrutar de un coche sin comprarlo, sino también para los autónomos y las empresas que necesitan un vehículo para desarrollar su actividad profesional. Algunos de los beneficios que ofrece el renting para estos colectivos son:

  • Financiación: el renting facilita la financiación de los vehículos, ya que no requiere de una inversión inicial ni de un endeudamiento a largo plazo. Además, al tratarse de un gasto deducible, se puede ahorrar en impuestos como el IVA o el IRPF.
  • Imagen: el renting mejora la imagen corporativa de los autónomos y las empresas, ya que les permite disponer de una flota de coches moderna, actualizada y homogénea, que transmite una sensación de profesionalidad y confianza a los clientes y proveedores.
  • Tecnología: el renting permite acceder a las últimas novedades tecnológicas en materia de seguridad, confort y eficiencia, lo que mejora la experiencia de conducción y reduce el riesgo de accidentes o averías.
  • Gestión: el renting simplifica la gestión de los vehículos, ya que la empresa de renting se ocupa de todo lo relacionado con el mantenimiento, la reparación, el seguro, la ITV y los impuestos. Así, se ahorra tiempo y recursos que se pueden dedicar al core business del negocio.