Cartelera. Las frenéticas aventuras de El equipo A, los Niños Grandes de Adam Sandler y compañía, lo nuevo de Zeta Jones y el experimento científico de Vincenzo Natali son algunas de las propuestas para esta semana.
Jesús Benabat. Con la resaca del éxito rotundo de Toy Story 3 aún en plena vigencia, la cartelera no da respiro alguno y el desembarco de esperados estrenos veraniegos no cesa. Ahora, el turno es de los chicos de El equipo A, la adaptación cinematográfica de la popular serie de televisión de los años 80. En esta nueva aventura, los antiguos soldados retoman el carácter iconoclasta que los definió en su origen, sin renunciar al espectáculo más actual que posibilitan los efectos especiales y las nuevas técnicas informáticas.
Para ello, un reparto de altura que incluye al incombustible Liam Neeson como el inolvidable Coronel Hannibal Smith, el guaperas de Bradley Cooper (Resacón en Las Vegas) como Templenton Fenix, el debutante Quinton Rampage Jackson en el rol de M.A (y el difícil papel de sustituir al mítico Mr.T) y Sharlto Copley (Distrito 9) como el piloto excéntrico Murdock, además de la chica de la película, interpretada por Jessica Biel. Tras las cámaras, el prometedor Joe Carnahan, que tras el relativo éxito de Ases Calientes, ya se encuentra preparando Killing Pablo, con Christian Bale como protagonista. Así pues, adrenalina pura, humor irreverente y cierta nostalgia ‘ochentera’ para un estreno que encuentra su razón de ser en la temporada estival.
Sin embargo, este no es el único estreno de la semana destinado a jóvenes en busca de diversión. Niños Grandes, la típica y refrescante comedia absurda especialmente pensada para el público masculino, reúne a buena parte de la plana mayor de la comedia americana, liderada por Adam Sandler y al que acompañan Kevin James, Chris Rock, Steve Buscemi (ignoro qué hace aquí) y Rob Schneider, además de Salma Hayek y Maria Bello como el necesario contrapunto femenino. La historia es bien sencilla; un grupo de amigos se reencuentra 30 años después por el fallecimiento del que fuera su entrenador de baloncesto para pasar un fin de semana juntos y dar rienda suelta a todas las locuras que hicieron antaño. Una revisión del mito de Peter Pan en clave palomitera y sin mayores pretensiones bajo la dirección de Dennis Dugan, un realizador curtido en el género gracias a Un papá genial, Seguridad Nacional o Zohan.
En una línea algo más rosa, Mi segunda vez supone el regreso de Catherine Zeta Jones a la comedia romántica tras Sin Reservas. En esta ocasión, Zeta Jones interpreta a una sexy madre madura que, tras conocer que su marido la engaña, inicia una relación pasional con un joven de 24 años (Justin Bartha) que la hace sentir viva de nuevo. Cine de género sin demasiadas promesas de calidad aunque idóneo para una sesión de cine sin preocupaciones.
En un registro radicalmente opuesto, llega a nuestras carteleras Splice: Experimento mortal, el nuevo y perturbador proyecto de Vincenzo Natali, quien ya revolucionó el género de la ciencia ficción con sus dos primeras películas, Cube y Cipher. Su nuevo intento de transgresión cinematográfica reúne a Adrien Brody (algo despistado en los últimos años) y Sarah Polley como dos brillantes científicos que traspasan la línea de lo moralmente aceptable al combinar ADN humano en sus experimentos genéticos, dando lugar a una criatura que parece suponer un nuevo escalón en el árbol evolutivo actual. Ciencia ficción combinada con terror en una película inclasificable que hará las delicias de los aficionados al género.
Por último, nos referiremos a tres películas independientes de diferente origen aunque con escasas posibilidades de verse en la cartelera de nuestra ciudad. En primer lugar, El silencio de Lorna, un drama de los hermanos Dardenne que ganó el premio al Mejor Guión en el festival de Cannes de 2008 y que llega con dos años de retraso a nuestras pantallas. Por último, el drama familiar canadiense Mamá está en la peluquería y una nueva ‘marcianada’ del norteamericano Todd Solondz, La vida en tiempos de guerra.