La Fundación Atarazanas y la Consejería de Cultura retoman los contactos para analizar las fórmulas que permitan recuperar las Reales Atarazanas y presentar un proyecto «que sea paradigma de la sociedad moderna andaluza».
En sustitución del Consejero de Cultura y Deportes, Luciano Alonso, recientemente accidentado de una pierna, la secretaria general, Montserrat Reyes, se ha reunido con miembros de la Fundación Atarazanas para estudiar la viabilidad y puesta en valor del monumento, propiedad de la Junta de Andalucía.
El presidente de la Fundación Atarazanas, José Manuel Núñez, ha insistido en la necesidad de «superar el vacío emocional que se haya podido generar tras el abandono unilateral del Caixaforum» por parte de la entidad bancaria Caixabank. Según la fundación, las Reales Atarazanas debían erigirse como un espacio de memoria que se cuenta a sí mismo, en su contexto geográfico junto al río Guadalquivir y el centro histórico de Sevilla.
«Debería convertirse en un espacio cultural de excelencia, moderno y multifuncional, donde se desarrollen grandes exposiciones y actividades culturales de carácter dinámico y de referencia internacional», según un comunicado remitido por la fundación.
El encuentro ha servido para retomar la apuesta por este espacio y esbozar «un modelo cultural en Atarazanas que sea paradigma de la sociedad moderna andaluza que mira con esperanza al futuro y cuida su pasado».