Mucho ha llovido desde aquellos compendios con los que J.C.R. Licklider desarrolló los primeros intentos de interacciones sociales a través de computadoras y redes de comunicación, allá por 1962. Desde entonces y hasta aquí diversas han sido las etapas, tanto que hemos sido testigos de la evolución de la web 1.0 tradicional y unidireccional; al modelo bidireccional 2.0, en el cual los nuevos entornos virtuales permiten crear contenidos, modificarlos, generar opinión con respecto a los usuarios y posibilidades de realizar trabajos colaborativos, críticos y creativos.
Como referencia, entre otras, el 21 de marzo de 2006. Ese día, el cofundador de la red social Twitter, Jack Dorsey, publicaba el primer tuit de ensayo. Apenas un año después, Chris Messina, otro pionero de la plataforma, daba origen al primer hashtag. Y el resto se cuenta prácticamente por sí mismo. En poco más de una decena de años el servicio ha pasado de ser un sucedáneo de mensajería sms a una plataforma de contenidos integrada plenamente en nuestro día a día, alterando dicho sea de paso la forma de comunicarnos y estar informados.
Y dentro de esa vorágine comunicativa que engloban los alrededor de 500 millones de tuits diarios, describiendo opiniones, estados de ánimo, imágenes, chistes e insultos, entre otras diatribas, y que consumimos ferozmente, las hermandades sevillanas han encontrado, como otras tantas organizaciones a lo largo y ancho del mundo, un escenario propenso de acercamiento a sus fieles y devotos. Incluso la propia Iglesia, desde el mismísimo Para Francisco (@Pontifex_es), hasta en nuestro caso la Archidiócesis de Sevilla, a través de su Delegación de Medios (@Archisevilla1), participan activamente del día a día por medio de esta nueva vía de largo alcance.
De este modo, en la actualidad la inmensa mayoría de hermandades sevillanas, así como otras asociaciones y agrupaciones de carácter religioso, poseen espacios oficiales reconocidos en la red social que nos ocupa. Se cuentan con los dedos de una mano las que aún no se han incorporado. No en vano, Twitter se ha instalado en nuestras vidas como una herramienta fácil y cómoda, además de accesible gracias al uso extendido de la nueva generación de smartphones, con la que compartir información de manera rápida. Noticias relativas a cultos, actos, avisos o la exposición diaria del Evangelio, alcanzan al instante a los cientos de miles de seguidores repartidos dentro y fuera de nuestras fronteras. Circunstancia que aprovechan los medios de comunicación que cubren la actualidad de nuestras hermandades, que de este modo reciben información de primera mano acerca de éstas.
Complejo resultaría su análisis, sin embargo emergen ciertas pautas que nos permiten aproximarnos al uso y gestión con el que las corporaciones de la ciudad se manejan en el entorno complejo de los 140 caracteres, vinculadas en buena medida a las preocupaciones volcadas en cada caso por las diferentes juntas de gobierno. Es por ello que la actualización, la interacción y el lenguaje comunicativo distan en buena medida entre unas hermandades y otras.
A grandes rasgos sería posible afirmar que el número de seguidores conjuga a partir de las variables devoción, tratamiento de contenidos y número de tuits, si que a priori prime un patrón claro que nos permita diferenciar el peso de cada variable en el contexto general. Atendiendo a ello se da la paradoja de que el volumen de seguidores no vincula en estrecha consonancia al número de hermanos. Así por ejemplo, la Hermandad de la Lanzada (@LanzadaSevilla) supera los 17.000 seguidores pese a estar lejos de las hermandades con mayor número de hermanos en su nómina. Un caso similar es el que tiene como protagonista a la corporación trianera de La O (@hermandaddelao). Por su parte, la escrupulosa línea que establecen perfiles como el del Gran Poder (@HdadGranPoder), San Bernardo (@hdadsbernardo) o la Corona (@Hdadcorona), entre otras, les otorga una personalidad destacada. Igualmente, los perfiles en esta red de la Estrella (@hdadlaestrella), o el Carmen Doloroso (@Hdad_del_Carmen), merecen ser reconocidos por la personalidad con la que han conseguido ganarse un estilo propio.
Por último, a continuación se muestran dos tablas en las que se recogen datos de las hermandades sevillanas en función al número de tuits y de seguidores, estableciendo un ránking decreciente.
Las diez hermandades de Sevilla con mayor número de seguidores en Twitter
1. Esperanza de Triana 43,8K
2. La Macarena 36,6K
3. San Gonzalo 22,5K
4. El Cachorro 23,2K
5. La Estrella 23,2K
6. Gran Poder 23K
7. Los Gitanos 19,4K
8. La Paz 18.,9K
9. San Benito 18,5K
10. La Lanzada 17,4K
Fuente: Twitter. Consulta propia, con fecha 12/09/2017
Las diez hermandades de Sevilla que más tuitean
1. La Exaltación 12,9K
2. El Cachorro 11,7K
3. La Estrella 11,1K
4. La Hiniesta 9.412
5. San Pablo 9.221
6. Los Negritos 8.516
7. La Lanzada 8.173
8. Los Gitanos 7.315
9. El Cerro 7.067
10. San Benito 6.908
Fuente: Twitter. Consulta propia, con fecha 12/09/2017