Profesional sanitario trabajando en un hospital / SA

La Consejería ya ha trasladado a los centros las instrucciones oportunas sobre requisitos de salud de los participantes, normas y circuitos y otros aspectos organizativos, que «contribuyen a la seguridad de estudiantes, profesionales sanitarios y pacientes, y a frenar la pandemia».

Los centros sanitarios públicos andaluces adoptarán todas las medidas de seguridad y precauciones frente a la Covid19 que sean necesarias para reanudar la actividad docente y las prácticas de estudiantes, con la máxima seguridad posible para alumnado, profesionales sanitarios y pacientes.

Con este fin, la Consejería de Salud y Familias ha trasladado a los centros sanitarios el documento que recoge las instrucciones para la reanudación de la actividad docente presencial y prácticas en el Sistema Sanitario Público de Andalucía, en aplicación de la Orden de 17 de junio de 2020 por el que se aprobaron las mismas.

Las medidas de seguridad previstas son rigurosas y de diversa naturaleza, ya que están referidas a los requisitos de salud de los participantes en la actividad docente y los medios para su comprobación; a las normas de obligado cumplimiento, y a aspectos organizativos, como el establecimiento de determinados circuitos o el uso seguro de espacios.

Esfuerzo de coordinación

Desde hace varios meses, la Consejería de Salud y Familias, en colaboración con la Consejería de Educación y Deportes, las universidades andaluzas y los propios centros sanitarios, ha venido trabajando de manera intensa y coordinada. El primer fin fue conseguir completar satisfactoriamente la formación práctica iniciada durante el pasado curso escolar, y que se vio afectada por el estado de alarma y las consiguientes medidas de confinamiento derivadas de la pandemia.

En la misma línea, se ha seguido realizando un esfuerzo conjunto y coordinado para programar el curso que comienza y que las prácticas de los futuros profesionales puedan llevarse a cabo de manera segura. Para ello, se han tenido que realizar diversos ajustes, se han planificado minuciosamente aquellas actividades que requieren presencialidad y se han considerado rigurosas medidas de seguridad, con el afán de lograr que el alumnado tenga la mejor formación práctica posible.